Los empleados en Apple Park, la nueva sede central de Apple en California, no dejan de lesionarse puertas y ventanas de vidrio.
Apple Park es un gigantesco edificio de vidrio y metal de cuatro pisos (costó casi cinco mil millones de dólares) diseñado por Norman Foster, construido en vidrio.
Según los informes, los umbrales de las puertas son planos para ajustar las formas de manejarse en un edificio curvo, que utiliza las piezas de vidrio más grandes y más pesadas jamás instaladas.
El cofundador de Apple, Steve Jobs, dijo en una ocasión que construirían el el mejor edificio de oficinas del mundo.
Según varios informes que ha publicado la agencia Reuters, los empleados han estado lidiando con el problema de golpearse con el vidrio de las puertas desde que abrieron por primera vez.
Apple ha tenido que recurrir a lo que se hace en las terrazas acristaladas de cualquier edificio: un juego de pegatinas.
Las aves volando sobre los grandes paneles de vidrio de los edificios son un peligro común, pero las personas a las que les ocurre lo mismo no es tan normal. En enero, el vicepresidente de propiedades y desarrollo de Apple, Dan Whisenhunt, habría reconocido el problema declarando en público que: «Hemos tenido gente chocando contra el vidrio. Ese es un problema en el que estamos trabajando ahora mismo».
D.L.