En la rueda de prensa diaria del Comité Técnico de Gestión del Coronavirus, el Director Adjunto Operativo (DAO) de la Policía Nacional, José Ángel González, ha llamado la atención sobre aquellas personas que, diez días después de haberse declarado el estado de alarma, «todavía son bastantes irresponsables», algo habitual en sus comparecencias aunque este martes ha desvelado un hecho inusual hasta la fecha.
Se trata, ha dicho, «de varios casos de pacientes ingresados en distintos hospitales, que sin darles el alta ningún médico, han abandonado los mismos», lo que para la Policía Nacional «supone un grandísimo trabajo de localización, de ver la trazabilidad y con qué taxi se han ido».
En relación a esa mayor irresponsabilidad de algunas personas, la Policía interpuso ayer otras 6.000 denuncias más por desobediencia mientras que la Guardia Civil lleva desde el 19 de marzo con una media por encima de las 3.000 denuncias diarias.
Todas ellas, ha explicado el Jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil, Jose Manuel Santiago, «por conductas irresponsables e insolidarias» de personas que «siguen sin ser conscientes de la gravedad de la situación a la que nos enfrentamos».
Ambos cuerpos detuvieron ayer a 80 personas por estos hechos, uno de los cuales fue un hombre en la provincia de A Coruña, quien tras haber sido arrestado previamente por incumplir limitaciones en la circulación, volvió a ser identificado más tarde por los agentes llegándose a enfrentar con ellos.
Al margen de los controles en las fronteras terrestres, con 534 denegaciones de vehículos, las fuerzas de seguridad también han rechazado la entrada de tres aviones, dos en el aeropuerto Madrid Barajas Adolfo Suárez y otro en Málaga.
El número dos de la Policía ha resumido que todas estas actuaciones se realizan con un solo objetivo: «Evitar que nuestros sanitarios puedan ser sobrepasados por un numero de infectados que ciertamente se puedan evitar», ya que «el mundo sanitario es el corazón para superar esta crisis».
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