Colgados en su terraza, les delata una bandera de España y un arcoiris, simbolizando la esperanza para su país, dibujado por su hija pequeña de 4 años.
Las 6 horas de diferencia horaria no ayudan, por lo que las noches se tornan aún más complicadas para ellos.
«Días en los que no hay horas, no hay ni minutos ni segundos… sólo momentos como el actual en el que esperas oír noticias positivas de tu país antes de acostarte. Simplemente el hecho de no tener una llamada ya es la mejor noticia para dormir un poco más tranquilos. Es lo que tiene estar tan lejos, con 6 horas de diferencia… que vives el amanecer y el anochecer dos veces… el de aquí y el de nuestras familias y amigos»
Allí, en Madrid, viven confinados en sus casas varios miembros de la familia, considerados población vulnerable, pero son ellos, vaya paradoja de la vida, los que a través de la infinidad de vídeo llamadas y whatsapp los dan ánimos y aliento.
«El día que el Presidente de la República del Perú, Vizcarra, decretó cuarentena y aislamiento social obligatorio, nos sentimos aliviados, ya que por pura empatía con nuestra familia y sociedad española en general, estábamos por fin en sus mismas condiciones».
«Es durísimo lo que está pasando en España, en Madrid, de donde somos, es brutal, pero vivirlo desde tanta distancia se hace realmente complicado».
Las RRSS, los medios de comunicación españoles, los mensajes de amigos y conocidos, mantienen al día de los acontecimientos a esta familia, con billetes de retorno a España en Julio para sus vacaciones, y que ahora temen y están seguros de que no podrán utilizar.
Los besos y abrazos virtuales, se han convertido en la máxima expresión de cariño y afecto. Los juegos con su pequeña de 4 años, les hacen evadirse de la pesadilla real «nos hace mantenernos cuerdos», y cada noche sueñan con que al levantarse o quizá no acostarse, el pico descienda.
«Aún con todo lo que está pasando allí, tenemos la imperiosa necesidad de estar con ellos cerca, te sientes impotente».
Al igual que ellos, en Perú hay una población censada de casi 24.000 españoles.
«Desde este espacio queremos animar a todos los españoles residentes en Perú, algunos amigos y conocidos, que nos consta que compartimos el mismo sentimiento. Cada mañana es un día menos para volar, literalmente, y comernos a besos y abrazos a nuestra gente»
Una madrileña residente en Lima
Estrella Digital