El español Ezequiel Mosquera (Xacobeo) no logró el objetivo de desbancar al italiano Vicenzo Nibali (Liquigas) del primer puesto de la general de la Vuelta a España, en la etapa reina entre San Martín de Valdeiglesias y la Bola del Mundo, en Madrid, pero sí se impuso en la etapa.
Los 172 kilómetros fueron recorridos por Mosquera, protagonista principal en la jornada en 4 horas, 45 minutos y 30 segundos. Segundo fue Nibali, por lo que la general queda como estaba con el italiano al frente y Mosquera, segundo a 50 segundos.
La carrera se lanzó a partir del kilómetro 20 con 18 corredores en vanguardia, entre ellos el belga Gilbert (Lotto), doble vencedor de etapa, Rubén Plaza y Arroyo (Caisse), Gusev (Katusha), Veloso (Xacobeo) y Oroz (Euskaltel). Por el Puerto de la Cruz Verde (3ª, km 31) el pelotón acumulaba ya 3 minutos de retraso.
Treinta kilómetros después, en el Alto del León, el Caisse D’Epargne y el Katusha empezaron a mover fichas, ya que ambos estaban interesados en la general por equipo, separados por un puñado de segundos.
Las diferencias fueron menguando, así como los componentes de la fuga. El primer paso por Navacerrada (km 120) coronó a dos hombres en cabeza, Rubén Plaza y el suizo Tschoop, con 1.15 sobre un rosario de corredores que bajaron volando el puerto. El Liquigas del líder, Nibali, y el Xacobeo de Mosquera ya estaban iniciando el marcaje en cabeza, si bien los hombres de la escuadra italiana iban a la expectativa, sin exponerse.
A 29 kilómetros de meta los perseguidores se unieron a Plaza y Tschoop. Juan José Oroz (Euskaltel) se puso a tirar a tope en cabeza, sin relevos, con el grupo principal a 1.44. En la avanzadilla tres hombres del Euskaltel y tres del Caisse D’Epargne.
La fuga terminó a 5 kilómetros del Alto de Navacerrada, en su segundo paso. David García (Xacobeo) al lado de su jefe, Ezequiel Mosquera, y Kreuziger (Liquigas), con Nibali. Los favoritos con un solo ayudante cada uno.
Frank Sckleck cambió el ritmo a 2 kilómetros de Navacerrada, el luxemburgués seleccionó el grupo de los elegidos y a continuación tensó Mosquera, que abrió unos metros de ventaja en la cima, sin lograr soltar a Nibali, que reaccionó.
La carrera iba lanzada y los ataques fueron continuos teniendo a muchos animadores, siendo el más destacado el protagonizado por los españoles Oscar Pujol (Cervelo) y Amets Txurruka (Euskaltel Euskadi). Su fuga fue también para la galería al no prosperar.
A medida que se acercaba la ascensión a la Bola del Mundo los favoritos comenzaron a tantearse. El primero en salir fue el luxemburgués Frank Scheck (Saxo Bank) que solo sirvió para tensar un poco más la carrera. El relevo lo cogió el español Ezequiel Mosquera (Xacobeo).
Mosquera logró marcharse a falta de unos tres kilómetros, pero Nibali reaccionó y los dos viajaron juntos durante algunos metros y de nuevo Mosquera logra marcharse acariciando por algunos momentos la victoria ya que se acerco a los veinte segundo a falta de un kilómetro.
El sueño del español se esfumaba a medida que se acercaba meta. Nibali lo alcanzaba y se convierte en el virtual ganador de la prueba a falta de la última etapa; mientras Mosquera que es segundo en la general tuvo como premio la victoria de etapa y el primero en inscribir su nombre en la estación de la Bola del Mundo, en una etapa espectacular.
Mañama se disputará la vigésima primera y ultima etapa, una especie de homenaje para los vencedores de los diferentes podio y también para los que han conseguido llegar a Madrid. La salida tendrá lugar en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes y la llegada en el paseo de La Castellana de la capital española.