El tenista español David Ferrer certificó este miércoles su pase a las semifinales de Roland Garros, segundo ‘Grand Slam’ del año, después de deshacerse al escocés Andy Murray (6-4, 6-7(3), 6-3, 6-2) en un partido en el que Ferrer fue más determinante en los momentos clave para conseguir una victoria que le permite visitar por primera vez en su carrera la penúltima ronda del torneo francés, donde se verá las caras con el también español Rafael Nadal.
Ferrer, sabedor de la gran oportunidad que tenía delante, comenzó muy intenso sobre la Suzanne Lenglen, obligando al tenista escocés a emplearse al máximo para aguantar su ritmo. Tal fueron las ganas y el juego del alicantino que no tardó en dar el primer zarpazo al marcador, ya que en el cuarto juego rompió el saque de Murray y se puso comandando el marcador por 3-1.
Una ventaja que le servía para cerrar el set, algo que le costó hacer más de lo esperado. Y es que pese a que el británico llegó a desperdiciar hasta seis bolas de ‘break’, Ferrer aguantó su diferencia hasta el 5-2, donde dejó escapar una pelota de set al resto.
Tras ganar su saque, Murray consiguió un ‘break’ que le permitía con su saque poner de nuevo la igualdad, sin embargo, cuando lo tenía todo a favor volvió a flojear y cedió una vez más su saque certificando el set para Ferrer por 6-4.
La locura de los ‘breaks’ tuvo continuación en el segundo set, ya que los dos primeros juegos supusieron dos nuevos ‘breaks’ que dejaban el marcador igualado. El partido se estabilizó y ambos encadenaron dos servicios ganados. Sin embargo, la cordura no duró mucho y el séptimo y octavo juego volvieron a ser otras dos roturas de saque que no permitieron a ningún tenista tomar ventaja, por lo que se llegó al ‘tie-break’.
En la muerte súbita Murray dio el do de pecho y se colocó con un amplio 5-1. Pese al intento de remontada del tenista de Jávea, el escocés cerró el ‘tie-break’ e igualó el partido.
La lluvia seca a Murray
Al comienzo del tercer set el partido se nubló para Murray igual que el cielo francés, que comenzó a dejar caer el agua suspendiendo el partido durante unos minutos. El parón se le atragantó por completo al tenista británico, que a la vuelta no pudo contener al vendaval español.
Ferrer consiguió ganar tres juegos consecutivos tras volver a la pista, por lo que se puso con ‘break’ arriba. El alicantino volvió a apoyarse en su físico y comenzó a desesperar por momentos a su rival. Murray hizo un amago de reacción, rompiendo el servicio del español en el sexto juego, pero una y otra vez daba una de cal y otra de arena, por lo que cedió a continuación sus dos siguientes saques, propiciando el 6-3 para el sexto cabeza de serie del mundo.
La consecución del tercer set concedió a ‘Ferru’ una inyección de moral y entusiasmo, por lo que puso la directa en el cuarto set para cerrar el partido y acercarse así por primera vez en su vida a las semifinales de Roland Garros. Murray siguió a lo suyo, desquiciado por momentos e incapaz de aguantar la intensidad de su contrincante.
Este cuarto set volvió a llevar la dinámica de los anteriores, con un carrusel de ‘breaks’ en el que el español consiguió dos y su rival uno. Por lo tanto, Ferrer de nuevo tomó ventaja y se puso con 4-1 a su favor. Una ventaja que vio peligrar con 4-2, ya que el tenista de Dunblane tuvo hasta dos pelotas de rotura que, sin embargo, salvó Ferrer.
El pupilo de Javier Piles no quiso alargar la agonía de su rival y a continuación volvió a conseguir un nuevo ‘break’, el último del partido, el definitivo que propició la victoria final de David Ferrer. Con este triunfo, el tenista nacido en Jávea consigue por tercera vez acceder a las semifinales de un ‘Grand Slam’ y será la primera vez en su carrera que dispute la penúltima ronda de Roland Garros.
Sin embargo, el alicantino no tendrá nada fácil el poder acceder a la final que se disputará este domingo, ya que se medirá en semifinales al también español Rafael Nadal, vigente campeón del torneo parisino y que busca su séptimo triunfo sobre la arcilla de la Philippe Chatrier.