El tenista escocés Andy Murray ha alcanzado la final del torneo de Wimbledon, tercer ‘Grand Slam’, después de superar en semifinales al francés Jo-Wilfried Tsonga (6-3, 6-4, 3-6, 7-5) con lo que se convierte en el primer británico que accede al último envite del Abierto Británico después de 74 años, y se medirá por el título con el suizo Roger Federer.
Murray, la gran esperanza local, puede conquistar Wimbledon este domingo ante un Federer incansable que buscará su séptimo ‘grande’ inglés además de alzarse con el número uno del mundo. El escocés por su parte, accede a su primera final después de cuatro años consecutivos llegando a semifinales.
Tras el triunfo de Fred Perry en 1936, ningún tenista de las Islas volvió a ganar en el All England Club. Murray está a las puertas de convertirse en héroe británico después de superar este viernes al francés Tsonga en un completo duelo de semifinales. El tenista local bordó su actuación en los dos primeros sets y, a pesar de la reacción del galo, Murray se mantuvo en el partido para certificar la victoria en el cuarto set.
Y es que las dos primeras mangas fueron casi un paseo para Murray, arropado por la grada y jugando a un gran nivel. En el primer set, con una rotura inicial, Murray comenzó con ventaja el comienzo de la semifinal (3-0). Bien con su saque y voluntarioso con los esfuerzos físicos, el escocés llevó las riendas del set sin regalar opciones a su rival (6-3).
Tsonga lo intentaba pero su rival gozaba de una motivación añadida en su compromiso con las islas británicas. Al igual que con el español David Ferrer en cuartos de final, Murray jugaba con bolas muy bajas y complicaba mucho el juego del galo, que acumulaba ya el doble de errores no forzados. En el quinto juego del segundo set Murray aprovechó la oportunidad para romper el saque de Tsonga (3-2) y allanar el camino hacia el 2-0 (6-4).
La eficacia de Murray con su servicio era demoledora y su confianza sobre la hierba inglesa comenzaba a ser abrumadora. Sin embargo, con todo perdido, Tsonga salió a intentar la heroica en el tercer set. Una imagen, la del francés volando en la red para conseguir romper el saque de Murray por primera vez (0-2), fue claro ejemplo del cambio que experimentó el tenis y la cabeza del francés.
Con la ventaja, Tsonga jugó más cómodo y aprovechó además el bajón de juego en Murray. Aun así, el cabeza de serie número cuatro no regaló el set y no cedió su saque de nuevo. Sin embargo, el escocés tampoco supo recuperar el saque perdido cuando Tsonga le dio opciones de ‘break’. Con ello, el tenista de Le Mans recortó distancias y metió presión a un Murray que se enfrentaba a sus fantasmas y a los de todo Reino Unido.
En el cuarto set esa presión se palpaba en los tenistas. Primero fue Tsonga el que se puso por delante rompiendo el saque ajeno en el cuarto juego (1-3). Sin embargo, con el partido ya roto y ambos tenistas dando lo mejor de cada uno, Murray recuperó su pérdida a continuación. Después, ambos desaprovecharon las bolas de ‘break’ con lo que el set parecía condenado al ‘tie-break’. Sin embargo, la esperanza local rompió a Tsonga en el momento preciso para sellar un triunfo merecido (7-5) y evitar un agónico desenlace.