El Deportivo de la Coruña y el Real Club Celta de Vigo, los dos últimos clasificados de la Liga BBVA, afrontan este viernes en el estadio municipal de Riazor (21.30 horas) uno de los derbis gallegos más trascendentales que se recuerda, ya que un fallo en la 28ª jornada ante el eterno rival podría acercarles a las llamas de Segunda. Con los vigueses a tres puntos de salvación y los coruñeses a nueve, el duelo entre ambos condenará necesariamente a uno de los dos conjuntos a sufrir todavía más hasta final de temporada. Volverá el Celta al coliseo deportivista en la máxima categoría después de seis temporadas, con unos precedentes optimistas: dos victorias en sus dos últimas visitas en Primera.
En la temporada 2005-06, el cuadro entonces dirigido por Fernando Vázquez, ahora técnico del cuadro coruñés, venció 0-2 con goles de David Silva y Jesús Perera; en la temporada siguiente, con el de Castrofeito todavía en el banquillo, repitió la gesta gracias a un tanto de Nené (0-1).
Sin embargo, los celestes no tuvieron tanta fortuna en su último choque en Riazor, la temporada pasada en Liga Adelante, cuando los de José Luis Oltra se llevaron los tres puntos. Un gol en propia puerta de Jonathan Vila adelantaba a los blanquiazules, que en el 82 vieron cómo Orellana parecía quitarles dos puntos; finalmente, Lassad dejaba la victoria en casa con un sensacional disparo desde la frontal (2-1).
El duelo más reciente entre los dos equipos, el 1-1 de la primera vuelta en Balaídos, dejó sensaciones agridulces en los dos conjuntos. Mario Bermejo adelantaba al cuadro olívico en el minuto 7, pero Juan Domínguez se encargaba de neutralizarlo en el 28 después de una gran jugada de Valerón en la que se fue de dos jugadores celestes.
Los coruñeses buscan los tres puntos como el «balón de oxígeno» que les mantenga con vida una semana más. Fernando Vázquez ya advirtió que necesitarán siete u ocho victorias en los once partidos que restan de temporada para salvar a un equipo que, según afirma, «está en la UCI». Colistas con 17 puntos en 27 partidos y con nueve jornadas consecutivas sin ganar, una derrota en el derbi podría suponer una ‘puntilla’ moral.
Los de A Coruña volverán a encontrarse con dificultades a la hora de formar su línea defensiva. El técnico local apostará previsiblemente de nuevo con Pablo Insua y Aythami como pareja de centrales, que ya ofreció buen rendimiento ante el FC Barcelona, aunque la vuelta de Carlos Marchena podría poner en duda el centro de la zaga. El portugués Sílvio, por la izquierda, y Ayoze, por la derecha, formarán en los laterales.
Abel Aguilar y Paulo Assunçao se encargarán de la construcción del juego coruñés, mientras que por delante Bruno Gama y Juan Carlos Valerón aportarán la creatividad para que Pizzi y Riki, que volverá al once en detrimento de Nélson Oliveira, intenten sorprender al rival.
Sin Timón en el centro del campo
El Celta, penúltimo con 23 puntos y el peor visitante de la categoría, necesita ante el eterno rival una victoria que le aúpe en la clasificación, y que supondría la primera desde la llegada de Abel Resino lejos de Balaídos.
El principal quebradero de cabeza de los de Vigo estarán en el centro del campo, en el que no podrá estar Álex López, que sufre una rotura fibrilar en su bíceps femoral derecho y estará entre dos y tres semanas de baja, lo que impedirá jugar también el partido ante el FC Barcelona. Por ello, el croata Daniel Pranjic apunta a titular por primera vez desde que recaló en el club vigués en el mercado invernal.
Le acompañarán Borja Oubiña y Augusto Fernández, insustituibles en el once, mientras que la entrada de Fabián Orellana y Krohn-Dehli también parece clara. En defensa, Jonny y Roberto Lago cubrirán las bandas y Demidov y Andrés Túñez formarán como pareja de centrales, por delante de Javi Varas, que defenderá la portería viguesa. Arriba nadie discute la figura de Iago Aspas, referencia ofensiva y máximo goleador del equipo con 10 tantos.
El partido, declarado de alto riesgo por la Comisión Antiviolencia, guiará el camino de los dos contendientes, que podrían volver a dejar a Galicia húerfana de equipos gallegos la próxima campaña. Por ello, Vázquez es claro: «Espero que a aquel que gane le sirva para salvarse». Riazor dictará sentencia.