El Real Madrid sumó su primera victoria en la eliminatoria de los cuartos de final de los ‘play-offs’ de la Liga Endesa que le mide al Blusens Monbus, al mejor de tres partidos, tras superar al conjunto gallego por 90-75 en un duelo marcado por el impacto de Sergio Rodríguez en el segundo cuarto, que marcó el devenir del choque.
Los pupilos de Pablo Laso, vigentes subcampeones de Europa, tardaron en entrar en el partido ante la ilusión del debutante Blusens, que ya ganó en el Palacio en la fase regular. Pero encarrilaron el primer triunfo de la serie en un segundo cuarto frenético y acabaron con la ilusión visitante por lograr una nueva heroicidad en la capital.
Como buena parte del curso en la competición doméstica, hubo dos versiones diferentes del Real Madrid. La relajada y permisiva, que entró de primeras en el juego de intercambiar canastas con un hipermotivado Blusens Monbus que soñaba con la cita. Y la de mayor intensidad defensiva, la realmente letal. Ésta última generalmente coincide, además, con la presencia de Sergio Rodríguez en pista.
Otro Rodríguez, pero éste jugando de visitante, mandó durante el primer cuarto. El base del cuadro gallego impuso su ritmo y encontró la forma de dañar una y otra vez la defensa local. La energía extra que da jugar unos ‘play-offs’ se notó al inicio. El Real Madrid no tenía problemas ofensivos pero su rival tampoco. Y el Blusens, todo descaro, se dejó notar (22-25, primer cuarto).
La rotación alteró el panorama. Los visitantes bajaron prestaciones, Sergio Rodríguez comenzó a sentirse cómodo, Marcus Slaughter a elevar el ritmo defensivo, y el Real Madrid comenzó a carburar de verdad. De la mando del canario, magistral en la dirección y multiplicando a Rudy Fernández y Nikola Mirotic, los de Laso subieron un peldaño su nivel y dejaron atrás a un Blusens superado y preso de las pérdidas (hasta ocho en el segundo cuarto), veneno mortal ante el Real Madrid.
Los gallegos se quedaron en once puntos en el segundo período (28-11) y se encontraron con un electrónico duro a la media parte (50-36). El Real Madrid pretendió cerrar el 1-0 en el inicio del tercer cuarto, alcanzando la veintena de puntos de diferencia (59-39, min.24) y sepultando la ilusión de su rival.
Pero enterrar a los gallegos resultaba imposible el día de su estreno en la fase final. Alberto Corbacho demostró porqué es el mejor triplista de la Liga Endesa y metió a su equipo en el partido, le hizo creer. Los veinte se convirtieron en diez al término del tercer cuarto (66-56). La esperanza había renacido.
Sin embargo, otro nuevo tirón local al comienzo del último acto fue ya definitivo. Con, cómo no, el ‘Chacho’ al frente de las operaciones, los madridistas engordaron la ventaja y caminaron, ya sí sin titubeos, hacia el 1-0 en una serie que verá este domingo, en la caldera de Fontes do Sar, el segundo encuentro, que en caso de derrota gallega podría ser el último.
Estrella Digital/EP