Neymar, no. Bale, sí. La diferencia entre uno y otro, en el terreno económico, 50 millones de euros a favor del brasileño. Por ese motivo es por qle que Florentino Pérez ha desestimado la contratción de éste, o al menos esa es la causa que esgrime, porque al parecer le hubiera salido al Real Madrid 150 millones de euros. Eso sí, por el contrario sí está dispuesto a pagar por Gareth Bale, el futbolista del Tottenham que le supondría al club blanco un desembolso de «sólo» 100 millones de euros.
Esa es una de las revelaciones que hizo el presidente madridista a José Ramón de la Morena en «El Larguero», donde desmenuzó lo que hubiera supuesto la llegada de Neymar. «Si hubiera podido ficharle en condiciones que no alteraran el ecosistema del club, lo habría hecho, pero los cálculos que hemos hecho, entre todo nos salía por más de 150 millones de euros, lo habría alterado todo», afirmó Pérez, que recalcó que había que negociar con diferentes enfoques, refiriéndose a su club de origen, su padre y un fondo propietario del 40% de sus derechos, reseñando que hubo posibilidad de ficharle «hace tres años» pero «el club no le dejó salir, le renovó». Pese a todo confesó que «Neymar me parece un magnífico jugador».
Su otra gran baza, de cara a la próxima temporada, y por supuesto siempre que sea el único candidato a la presidencia, será Zinedine Zidane. La intención de Florentino es poner en sus manos todo el proyecto deportivo, ya que considera que «es una persona que, además de ser muy competente en lo suyo, le pegó el madridismo y su única ilusión en este momento es el Real Madrid». Es más, tras confiar en que «entre él y el entrenador intentarán dar un salto cualitativo a la plantilla», adelantó que «me gustaría que fuera algún día nuestro entrenador».
Lo que no tiene tan claro es todavía el nombre del futuro entrenador, hasta el pundo de que negó que estuviera hecho el acuerdo con Carlo Ancelotti. De momento sí tuvo palabras para el entrenador del Borussia Dortmund, Jurgen Klopp, pese a indicar que «me gusta pero no sé si es el adecuado porque sus jugadores son más niños que los del Real Madrid».
También tuvo palabras de elogio para José Mourinho, «nos ha puesto en el lugar que corresponde. Cuando yo entré no eramos cabezas de serie en la ‘Champions’, eso no es normal. La normalidad es serlo y llegar a semifinales, como mínimo», y negó que su marcha se hubiera debido a un motín en el vestuario: «Los jugadores no son capaces de decirme a mí que Mouringo tiene demasiado poder y de hecho no deberían decirlo nunca. La autoridad la tiene el entrenador y la disciplina es fundamental».
Claro que a la hora de personalizar, Florentino calificó a Casillas como «el mejor portero del mundo» y dijo que la intención de Mourinho con él fue únicamente la de «motivarle». Respecto a otros nombres ligados a la entidad, el presidente resaltó que sigue siendo «la casa» del actual seleccionador nacional, Vicente Del Bosque, así como de muchos otros exjugadores como Raúl, Hierro, Míchel o Camacho, ya que, según él, «porque haya gente que diga que yo me llevo mal con Míchel o con Raúl no significa que sea verdad».
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