El mejor jugador de la Copa Confederaciones lleva varios meses buscando mansión en las cercanías de Barcelona. Su madre y su hermana llegaron antes de su presentación a la ciudad condal y se pusieron manos a la obra. Han visto varias casas, pero ninguna responde a las necesidades del caprichoso futbolista.
Neymar y su entorno ya han visto muchas mansiones en Castelldefels, pero ninguna le gustó lo suficiente como para instalarse allí. Las que se encuentran en alquiler tienen siete habitaciones y el crack necesita al menos nueve para meter a todos sus amigos dentro. Los Toiss, como se hacen llamar sus amigos, y su novia, Bruna Marquezine, tienen que encontrar todas las comodidades cada vez que vengan a Barcelona.
Esas comodidades podrían haberlas encontrado en el antiguo palacete donde vivía Ronaldinho. La familia de Neymar estaba enamorada de este alojamiento, pero el propietario lo alquiló poco antes de que la familia de Neymar desembarcara en Barcelona.
Además, el Barça se lo ha puesto fácil al jugador para que monte fiestas sin salir de casa. El club se encargará de pagar todos los viajes de los amigos del brasileño desde Brasil hasta España, tantas veces como se les antoje. Todo está incluido en un cláusula de su contrato.
Según Vanitatis, Neymar busca solo una solución provisional ya que su verdadera intención es comprar un terreno en la montaña de Castelldefels con vistas al Mediterráneo para construir la casa de sus sueños. Sin embargo, sus primeros días los pasará casi con toda probabilidad alojado en un hotel de lujo.