La selección española femenina de waterpolo ha conseguido una incontestable victoria esta noche contra Estados Unidos (9-6), con la que ha accedido a la semifinal de estos 15os Mundiales de natación de Barcelona, en una reedición de la pasada final de los Juegos Olímpicos de Londres en la que las de Miki Oca se tomaron la revancha con autoridad lideradas por Jennifer Pareja.
España empezó muy bien y quitándose el miedo de encima inspirada por una gran Jennifer Pareja. La capitana, máxima expresión de la voluntad de tomarse la revancha por la final olímpica, se puso el equipo a la espalda y consiguió cuatro de los cinco goles al descanso. Gracias a sus poderosos disparos de media distancia picados y a su inspiración desde el lanzamiento de penalti fue una pesadilla para Armstrong.
La portera estadounidense estuvo correcta durante el resto de partido pero España supo sacar provecho de esta inesperada ventaja inicial. En el ambiente del equipo nacional se respiraba ganas de acabar con la supremacía de Estados Unidos, quizá incluso rabia por el 8-5 encajado en la final de Londres que acabó con el sueño olímpico.
Pero estas ‘guerreras’ de Miki Oca sacaron el carácter cuando tocó, no se vinieron abajo en momentos de reacción estadounidense y, más todavía, se guardaron un fondo físico para acabar tremendamente intenso el partido. Fue tan grande el impulso cogido y tanta la tensión que había que incluso se pusieron 9-5 arriba, superando el 8-5 para las norteamericanas de aquella final trágica.
A falta de menos de medio minuto Estados Unidos puso el 9-6 definitivo en el marcador, pero España ya pensaba en que la revancha estaba lista para servir, en que se habían quitado la ‘espinita’, y ya en una Hungría que espera el miércoles en la semifinal. Este ha sido un gran paso pero todavía queda mucho para poder luchar por el oro.
Eso sí, España demostró esta noche en una Bernat Picornell con una gran asistencia y mejor comportamiento que ha cambiado el chip. Más allá de que la capitana Pareja apareciera intratable al inicio, de que Maica García se desquitara de los golpes recibidos a base de goles y pillería, como cuando se fue de la boya para abrirse camino al fondo de la red de Armstrong, las ‘guerreras’ tuvieron firmeza atrás e inteligencia arriba.
Incluso cuando Estados Unidos consiguió poner el 5-4 al descanso tras verse 5-2 abajo contra las de Oca. Margarett ‘Maggie’ Steffens solo logró un gol, estrellándose contra una Laura Ester eufórica y acertada en la portería, y ello lo acusaron las de Adam Krikorian, que también pagaron el esfuerzo de volver a ir a remolque hasta el 6-5. A partir de aquí, una puntilla durísima y mortal para Estados Unidos para el 9-5 ya solo maquillado por las norteamericanas.