El empresario Jabyer Fernández ha acusado, en la primera sesión del juicio por el caso Iurbenor, a la Diputación de Vizcaya y a dirigentes del PNV, entre ellos, el que fuera presidente nacionalista, Iñigo Urkullu, de «traicionarle» y de incumplir «el compromiso» de que la institución foral vizcaína atendería su petición de aplazamiento del pago de IVA por la venta que hizo Iurbenor de los terrenos de Sefanitro. Por su parte, el expresidente del Athletic de Bilbao, Fernando García Macua, será absuelto de un presunto delito fiscal.
Fernández ha realizado estas manifestaciones en el primer día del juicio que se ha iniciado este martes en la sección sexta de la Audiencia Provincial de Vizcaya contra el empresario, su hermana, Susana Fernández y Macua.
El fiscal solicita 10 años de cárcel para Jabyer Fernández y su hermana (seis y cuatro respectivamente) por sendos delitos de insolvencia punible en su modalidad de alzamiento de bienes, en concurso con otro de insolvencia punible en modalidad de concurso culpable.
Los hechos se remontan al 27 de enero de 2009, cuando, debido a la burbuja inmobiliaria y la crisis, Iurbenor tuvo que vender los terrenos de Sefanitro, en el barrio baracaldés de Lutxana en los que iba a construir 2.000 viviendas, a dos filiales de Caixa y BBK por 359,6 millones de euros. De ese montante, 297 millones fueron retenidos por los compradores para cancelar las hipotecas asumidas con las entidades bancarias, lo que dejó un remanente de 64 millones.
Responsabilizado de llevar a Iurbenor a la quiebra
La venta de los terrenos generó un IVA cifrado en 43 millones por la Diputación foral, cuyo aplazamiento de pago solicitó Jabyer Fernández y que le fue denegado por parte de la institución foral. La fiscalía responsabiliza a Fernández de haber llevado a la quiebra a Iurbenor al haber dirigido el dinero obtenido a otras empresas del grupo Afer.
En la primera sesión del juicio, el encausado ha asegurado que la denegación del aplazamiento del pago del IVA es lo que les llevó presentar el concurso de Iurbenor y ha afirmado que confiaba en que se le concediera, como ya se la había aceptado en el caso de otro aplazamiento de pago, en este caso para el grupo Afer.
Fernández ha asegurado que mantuvo reuniones con responsables de la Diputación vizcaína y con dirigentes del PNV como Joseba Aurrekoetxea y Andoni Ortuzar o el que fuera en ese momento presidente del partido, Iñigo Urkullu, para solicitarles ayuda para la concesión del aplazamiento.
El empresario ha afirmado que «no cumplieron su parte» y que le «traicionaron» porque finalmente no se le concedió ese aplazamiento del pago que era «ineludible» para el futuro de la empresa.
En el juicio, también ha comparecido como imputado como supuesto cooperador necesario en un delito fiscal, Fernando García Macua, que finalmente no será juzgado por ese delito y, por tanto, será absuelto.
Su absolución se basará en que Macua sólo ha sido acusado por la acción popular, sin que la fiscalía ni la acusación particular, ejercida por la Diputación le atribuían delito al procesado, por lo que se le aplica la jurisprudencia establecida en el ‘caso Botín’. Éste había sido acusado por dos accionistas de Iurbenor y tendrá comparecerá como testigo de la defensa de Jabyer Fernández.