Hace trece años, el clásico nos dejó una de las imágenes más vergonzosas del fútbol español. Todo el mundo se acuerda del cochinillo del Camp Nou el día que Figo volvió con la camiseta blanca, pero en estos últimos años la afición azulgrana se toma todo con más sentido del humor.
Después de la marcha de Mourinho, la situación se ha normalizado y este sábado se vivirá uno de los clásicos más amable de los últimos tiempos. Las rencillas entre Piqué y Arbeloa no tienen la suficiente importancia como para enrarecer el ambiente. Sin embargo, el Camp Nou no recibirá a los madridistas con los brazos abiertos, se perdería la salsa del fútbol.
La presión del público será igual de asfixiante que siempre para los titulares madridistas, pero se tomarán la suplencia de Iker con recochineo. Los seguidores azulgranas homenajearan a Tito Vilanova antes del partido, pero también le dedicarán una ovación cerrada a Iker Casillas. La suplencia de Casillas y las acusaciones que pesan sobre el jugador tachado de ser el topo del vestuario, junto con los rumores que le colocaban con la camiseta culé servirán como excusa para meter el dedo en la llaga
Además, la mayoría de los tuiteros se toman el tema con sentido del humor, aunque hay alguno que aprovecha para seguir demostrando su odio o admiración hacia el portero. «Corear el nombre de Iker Casillas es el nuevo símbolo y método del antimadridismo para desestabilizar al Real Madrid», asegura un usuario. Sin embargo, otros seguidores barcelonistas se dividen entre los que creen que no es de ser buen culé aplaudir a Iker y los que piensan que Casillas merece el aplauso sin sorna de por medio.