El Athletic Club de Bilbao sumó su quinta victoria de esta temporada –cuarta en casa– después de superar al Villarreal (2-0) en el nuevo San Mamés, un estadio en el que aún no conoce la derrota y que le permite situarse en unos puestos europeos en los que también se encuentra el conjunto castellonense pese a la derrota. Valverde decidió prescindir de sus ‘artistas’ en la medular, Beñat y Ander, para optar por un fútbol más físico y vertical. Y al Athletic, preocupado por el brillante momento de forma de Cani y Giovani, no pudo salirle mejor la apuesta. Los rojiblancos no tuvieron tanto el balón como acostumbran pero cuando lo tuvieron castigaron sin piedad, marcando diferencias con los tantos de Rico y Aduriz ante un equipo amarillo que además jugó toda la segunda mitad con un hombre menos.
Entre los tres centrocampistas del Athletic maniataron a la zona creativa del cuadro amarillo y comenzaron a empujar al equipo visitante hacia atrás. Iraola, un puñal vestido de lateral, halló una alfombra en la derecha y comenzó a bombardear el área, hasta que el Villarreal fue tumbado por primera vez pasada la media hora, tras un remate de cabeza del omnipresente Mikel Rico.
Casi sin tiempo para asimilarlo, el Villarreal regaló una ocasión de oro al hambriento Aduriz sólo dos minutos después. Musacchio no acertó a despejar y permitió al ariete vasco encarar a Asenjo, al que batió con la zurda para estrenar su cuenta goleadora esta temporada en la Liga BBVA.
Fue el preludio a una media hora de agonía para los visitantes, que llegaban a San Mamés en puestos ‘Champions’ y no fueron capaces de mostrar por qué. El Athletic desarboló a su rival y bien pudo hacer el tercer tanto, en unos minutos en los que el Villarreal consiguió salir vivo pero a un coste altísimo. Bruno fue expulsado de forma rigurosa por doble amarilla en el último minuto del primer tiempo y la remontada se convirtió en un imposible.
No pudo el equipo castellonense decidirse a buscar la remontada en parte porque bastante tuvo con sobrevivir. Giovani tuvo una buena ocasión desbaratada por Iraizoz, que también voló para salvar un libre directo de Trigueros. El Villarreal se consumió poco a poco ante un Athletic a la antigua usanza, vertical y descarado que se engancha a Europa.
Pese a caer en San Mamés y sufrir su segunda derrota de la temporada, el Villarreal se mantiene cuarto, sólo ya un punto por delante de un Athletic –sexto– que ha sumado más puntos en casa (13) que ningún otro equipo en lo que va de campaña.