La selección costarricense ha dado este domingo la sorpresa y se ha impuesto a Uruguay (1-3) en el primer partido de ambos en el Mundial, complicando algo más si fuese posible un grupo D en el que se suponía los costarricenses eran lel rival más flojo', gracias sobre todo a una brillante actuación del delantero Joel Campbell.
Lo bueno de un Mundial es que nunca ocurre todo lo previsto, siempre hay alguna sorpresa. Este sábado, en el Estádio Castelão de Fortaleza, Costa Rica dejó claro que eso es algo tan real como que el campeonato se disputa cada 4 años.
Llegó a Brasil como la comparsa del Grupo D, como el equipo que se iría a casa sin sumar un punto, con suerte lograría algún gol. Sus rivales: Uruguay, Italia e Inglaterra. Pues bien una vez plantados en el césped, a las primeras de cambio, los ticos decidieron que no querían ser el 'sparring' de esas tres potencias futbolísticas, que deseaban ser protagonistas.
Enfrente se encontró con una selección que llegaba con la leyenda del 'Maracanazo' a sus espaldas y con la cuarta posición en el último Mundial como tarjeta de presentación. Pero que llegaba también con un problema que empieza a ser recurrente en los celestes, muy poco juego en la zona de creación.
La primera parte dejó entrever cosas interesantes de los hombres de Jorge Luis Pinto. Los costarricenses salieron con defensa de cinco y tan solo Campbell arriba, y le dejaron el balón a los de Washington Tabárez que, con Arévalo Ríos y Gargano al timón, no supieron qué hacer.
Todo dependía de la inspiración de un 'Cebolla' Rodríguez que juega a tirones y de un Cavani que no estuvo fino. A pesar de todo un absurdo penalti de de Díaz a Lugano les permitió adelantarse, pero fue todo un espejismo, Uruguay vencía pero no dominaba y los 'ticos' estaban cómodos e incluso avisaban de cuando en cuando. Seguían tímidos pero poco a poco se soltaban.
Uruguay desapareció
Pero tras la reanudación la comparsa se animó. Los de Pinto arrancaron con la intención de voltear el resultado y Duarte tuvo una doble ocasión a la salida de una falta, era el minuto 50. A partir de ahí solo se vio a los hombres vestidos de blanco sobre el terreno de juego, al mando un Campbell que con su movilidad dejó en evidencia a Lugano y Godín, que parecían el Coyote detrás del Correcaminos.
El empate llegó en el 54 cuando el '9' tico culminó una magnífica jugada de Bolaños y Gamboa por banda. A los cuatro minutos, en pleno chaparrón, Duarte se desquitó y en otra falta lanzada por Bolaños dio la vuelta de manera definitiva. Uruguay no sabía qué hacer y Luis Suárez calentaba pero no parecía en condiciones de saltar al campo. En esas, el omnipresente Campbell seguía a lo suyo y a punto estaba de hacer el gol de lo que va de Mundial en un lanzamiento desde fuera del área.
Al final con Uruguay lanzada en busca de una heroicidad que nunca llegó, con Suárez viéndolo desde el banquillo, y con Costa Rica muy tranquila en las manos de Keylor Navas, llegó el último gol. Un brillante pase de Campbell –quien si no– dejó solo al recién incorporado Ureña que batió a un despistado Muslera.
Una vez pitado el final, tras una roja a Maxi Pereira provocada por Campbell, los jugadores costarricenses se reunían en el centro del campo y se animaban a seguir la senda de la victoria. La sensación es que la 'cenicienta' ha encontrado su zapato y que los uruguayos tienen ante sí un reto tan grande como el de 1950, deben ganar a Inglaterra e Italia si quieren tener opciones.
URUGUAY: Muslera; Pereira, Lugano, Godín, Cáceres; Stuani, Gargano (Álvaro González, min.60), Arévalo Ríos, Cristian Rodríguez (Abel Hernández, min.76); Forlán (Lodeiro, min.60) y Cavani.
COSTA RICA: Keylor Navas; Gamboa, Giancarlo González, Umaña, Duarte, Junior Díaz; Bryan Ruiz (Ureña, min.83), Tejeda (Cubero, min.74), Borges, Bolaños (Barrantes, min.88) y Joel Campbell.
Goles
1-0, min.24, Cavani (p).
1-1, min.54, Joel Campbell.
1-2, min.57, Duarte.
1-3, min.84, Ureña.
Árbitro: Felix Brych (ALE). Amonestó a Lugano (min.50), Gargano (min.56) y Cáceres (min.81) por Uruguay. Y expulsó a Maxi Pereira (min.90+3) también por los uruguayos.