Después de nueve años en la cima del ciclismo, Andy Schleck ha anunciado su retirada a nivel profesional, forzada por la lesión de rodilla sufrida en una caída durante el pasado Tour de Francia, algo ante lo que se ha mostrado «decepcionado» debido a que le hubiese gustado «seguir luchando», pero que ha resultado inevitable debido a que «apenas ha habido algún progreso» y existía el peligro de «sufrir una lesión irreversible» debido al estado del cartílago.
«Obviamente estoy decepcionado por acabar así mi carrera. Me hubiese gustado seguir luchando, pero mi rodilla no me lo permite. Desde mi caída en Reino Unido apenas ha habido algún progreso. Aunque los ligamentos se han curado, el cartílago dañado es otra historia. He estado trabajando duro en la rehabilitación de la rodilla pero ésta es la mejor manera de actuar ante el riesgo de sufrir una lesión irreversible» aseguraba Schleck en rueda de prensa organizada por el equipo Trek Factory Racing.
Además, el ciclista de Luxemburgo ha concluido que «el ciclismo ha sido» su «vida durante muchos años» y que, ante el inesperado final de su carrera, aún no ha pensado qué hará en el futuro, aunque ha querido destacar haberse sentido «muy feliz por haber competido y entrenado» junto a su hermano Franck y por «haber forjado grandes amistades» durante su carrera.
«Siempre he dicho que el ciclismo no es el principio del fin de mi vida. Tengo una novia fantástica y un hijo estupendo. Tengo ganas de descubrir lo que me depara», ha asegurado sobre su futuro el menor de los Schleck tras anunciar su retirada.
A lo largo de su carrera deportiva, Schleck ha luchado por la victoria en algunas grandes vueltas, consiguiendo hasta cuatro podios. Entre sus logros, Schleck se proclamó vencedor del Tour de Francia 2010 inicialmente ganado por Alberto Contador, con quien mantuvo una gran rivalidad. También logró el triunfo en la Lieja-Bastoña-Lieja de 2009 después de una gran escapada y otro de los mejores momentos de su carrera fue la victoria en el Galibier en el Tour de Francia 2011.