Joe Hart no guardará un gran recuerdo de su estreno en la Eurocopa de Francia 2016. Su equipo agrandó su leyenda negra al perder dos puntos en el tiempo de descuento y él también fue fiel a la tradición que dice que los porteros de la selección inglesa son poco fiables en estos campeonatos. No tuvo ningún error a la hora de atajar ningún balón porque ni si quiera se enfrentó a disparos fáciles desde la frontal.
Los pocos intentos de los rusos se fueron desviados, pero sus problemas llegaron cuando tuvo que jugar el balón con los pies. Sus desplazamientos en largo fueron siempre imprecisos y en varias ocasiones salieron directamente por la línea lateral. Sin embargo, el momento más gracioso del partido llegó cuando intentó volear en largo y le pegó a uno de sus centrales en la espalda porque casi no logró ni levantar el balón.
Abusó siempre del balón en largo, con lo que los jugadores rusos tenían muy claro lo que tenían que hacer cada vez que cogía el balón. Solo se decidió a sacar el balón jugado en el último minuto, cuando Rusia ya había empatado el partido. Fue al córner a proteger un balón e intentó tocar de una forma extrañísima. Perdió el balón, pero el delantero rival no logró encontrar la portería.
No tuvo demasiada responsabilidad en la jugada del gol porque el remate de Berezoutski se coló por la escuadra y el central llegó demasiado solo. Este partido servirá para dar credibilidad a los rumores que dicen que Pep Guardiola busca un portero que juegue mejor el balón con los pies porque no se fía nada de Hart.
Felipe Poza