Rafa Nadal superó a Aleksandr Dolgopolov (6-3, 6-3) en tan solo una hora y catorce minutos, gracias a un encuentro en el que mostró su tenis más sólido desde el fondo de la pista. El tenista manacorense confirmó las buenas sensaciones que había dejado en Abu Dhabi, con el añadido de que este era un choque oficial contra un rival que siempre se prevé muy correoso.
El español se las verá en segunda ronda contra Mischa Zverev y todo hace indicar que tendrá una gira australiana muy fructífera, ya que su nivel de confianza empieza a ser altísimo. Este martes jugó con golpes muy profundos y cimentó su victoria a partir de los poquísimos errores no forzados que cometió. Asimismo, las bolas que falló se le fueron por exceso de fuerza y no dejó casi ninguna pelota en la red porque en ningún momento se le encogió el brazo. Tampoco le tembló el pulso con el saque, por lo que todo hace indicar que este año también puede obtener buenos resultados en pistas duras durante este curso que acaba de comenzar.
El ‘head to head’ entre ambos jugadores hasta este encuentro estaba 5-2 a favor del balear, aunque en sus últimos dos enfrentamientos fue el ucraniano el que se se llevó el gato al agua en Queen’s 2015 y en Indian Wells 2014. Desde el calentamiento, se vio a Rafa enchufadísimo en cada una de sus carreras y con muchas ganas de empezar la temporada con muy bien pie. Sin embargo, el encuentro no empezó de la mejor manera para el manacorense, puesto que ambos jugadores lograron conservar su primer saque, pero Nadal perdió el segundo debido a varias malas decisiones que permitieron a Dolgopolov jugar con la pista demasiado abierta.
De esta forma, el set se puso rápidamente en contra de Nadal, ya que Dolgopolov logró consolidar el break en el siguiente juego. En cambio, en el sexto parcial, el ucraniano tembló con el saque, jugó demasiado con segundos servicios y dejó en la red varias bolas para permitir que el ‘rey de la tierra’ igualase la manga a tres.
Los pantalones le jugaron una mala pasa a Dolgopolov
Además, Dolgopolov empezó a tener problemas con sus pantalones, ya que se le cayeron dos pelotas del bolsillo y le hicieron jugar muy incómodo. Por todo eso, perdió mucha solvencia en sus golpes y cedió también los tres juegos posteriores para entregar el primer set a un Rafa Nadal que mostró su versión más solvente. De hecho, el español cerró esa manga a golpe de ace y derechas profundas.
No obstante, Dolgopolov aprovechó el descanso entre el primer y el segundo set para ir al vestuario a cambiarse de pantalones. Con esto, los primeros juegos del segundo set cayeron con más o menos facilidad para los sacadores, sin que los restadores disfrutasen de ninguna opción real de ruptura. En cambio, el quinto juego empezó con un acierto de Nadal a la hora de pedir el ojo del halcón. Asimismo, el manacorense también forzó el deuce con un passing marca de la casa, algo que a posteriori le sirvió para ponerse por delante gracias a una doble falta de su rival.
No obstante, en el siguiente game, Dolgopolov soltó la mano al ver muy cerca su derrota, pero eso solo le sirvió para disfrutar de dos pelotas de ruptura que no llegó a aprovechar. Nadal logró mantener su servicio y eso desesperó por completo al ucraniano, que también volvía a jugar un partido oficial después de mucho tiempo de inactividad. Así las cosas, Dolgopolov aguantó un servicio, pero en el siguiente se dejó ir definitivamente y entregó el partido a Nadal.
Felipe Poza