Hemos tenido el control», decía Busquets tras el encuentro. Sí, pero no. El Barça tuvo la pelota, pero, salvo en diversos tramos de la segunda mitad, el Valencia jugó con soltura y determinación, dominando el área propia y la rival. Y cuando Leo Messi sacaba el martillo, allí que aparecían Gabriel Paulista y Garay, dos gigantes de la resistencia.
No había mejor manera para volver a la senda de la victoria que con un triunfo de alto voltaje, con una puesta en escena tan completa y ante un rival tan exigente como es el FC Barcelona. El triunfo del Valencia CF ante el conjunto azulgrana desprende matices que saben incluso mejor que el resultado final (0-2) y es que el equipo que dirige Albert Celades no dio opción a los de Setién. De la mano de Mestalla, que impulsó desde el primer minuto hasta el último, el Valencia CF supo rehacerse tras fallar un penalti en el minuto 10 de partido, acaparó las ocasiones de peligro y ejecutó con eficacia al líder de LaLiga, que intentó por activa y por pasiva encontrar una vía para perforar la portería de Jaume Domènech, sin éxito. Maxi Gómez, con un doblete estelar, lidera al Valencia CF en una victoria rotunda para seguir creciendo en LaLiga.
En ausencia de Parejo, fue Maxi Gómez quien asumió la responsabilidad de lanzar el penalti, pero Ter Stegen, especialmente inspirado, le negó el gol adivinándole el disparo. No decayó el Valencia CF ni tampoco el atacante, aclamado por Mestalla pese a su error al grito de “uruguayo, uruguayo”. Se venía arriba el conjunto de Celades. Primero, con un centro envenenado de Ferran Torres que Ter Stegen sacó sobre la línea de gol tras rebotar en Piqué. Después, con un disparo nuevamente de Maxi que el guardameta alemán desvió lo justo para que diera en la cruceta de su portería y que Gameiro en segunda instancia a punto estuvo de mandar para adentro… Si bien volvió a encontrarse con Ter Stegen.
Tribuna Estrella