Se apuesta por «un modelo mixto» en la proporción que la situación epidémica permita en cada momento, «garantizando tanto el acceso como los medios necesarios a toda la comunidad educativa en condiciones de equidad».
Lo ha señalado el departamento que dirige el ministro Manuel Casells en una nota en la que especifica que la comisión delegada de la Conferencia General de Política Universitaria, en la que está representada universidades y las comunidades, se reunirá a finales de este mes para coordinar el inicio de curso, y en septiembre se hará con la Conferencia de Rectores de Universidades Españoles (CRUE).
El Ministerio ha recordado que el pasado 10 de junio, junto con Sanidad, se elaboró una lista de recomendaciones y medidas de prevención sanitarias para su aplicación en los centros universitarios del conjunto del Estado; las comunidades, en base a ellas, han elaborado con las universidades los protocolos y planes para su implementación.
Para dichos planes, el Ministerio recomendó la concreción de un plan de contingencia que permita, en caso de que la situación sanitaria lo requiera, un cambio masivo e inmediato a un sistema de docencia «online».
«Son las autoridades sanitarias de las comunidades junto con el Ministerio de Sanidad las que en función de la situación y evolución de la pandemia por COVID-19 pueden establecer nuevas medidas de prevención y actuación en los centros universitarios», ha argumentado, no obstante, Universidades.
El departamento de Castells «está haciendo seguimiento y trabajando para una buena coordinación del conjunto del sistema universitario español junto con las comunidades y CRUE», se ha añadido en la nota.
Por otra parte, las medidas digitales contempladas en los planes de contingencia requieren de una estrategia de digitalización reforzada del sistema universitario tanto para las posibles situaciones de emergencia como para una flexibilización de las modalidades de enseñanza.
Dicha estrategia implica una mejora del equipamiento informático y redes telemáticas de las universidades, una capacitación del profesorado en la enseñanza en línea y una ayuda de la administración universitaria para la conectividad adecuada del conjunto del estudiantado, de forma que ningún estudiante sea discriminado por la persistencia de la brecha digital.
Para la implementación de dichas medidas de digitalización el próximo curso, las comunidades recibirán 400 millones de euros del Fondo Covid.
AM