Mino Raiola (Nocera, Italia, 1967), uno de los representantes de futbolistas más importantes y peculiares del mundo, falleció este sábado, según confirmó la familia del empresario. “Con infinito dolor anunciamos la muerte del más cariñoso y extraordinario agente”, publicó la familia de Raiola en Twitter. El pasado jueves, algunos medios italianos anunciaron su muerte, aunque su médico lo desmintió poco tiempo después. Su situación, no obstante, era crítica.
Raiola era el agente de jugadores tan relevantes como el sueco Ibrahimovic, el francés Paul Pogba, el italiano Verratti o el holandés Matthijs De Ligt. Sin embargo, la ‘joya de su corona’ era el noruego Erling Haaland, actual jugador de Borussia Dortmund, uno de los jugadores llamados a liderar el mundo del fútbol en los próximos años y a marcar todo un récord de traspaso este mismo verano, ya que Raiola intentaba colocarlo en el Manchester City o el Real Madrid.
El superagente era conocido por su agresivo modo de negociar los contratos y las abultadas comisiones que cobró en los últimos años. Solo en 2020 fue capaz de generar 720 millones en contratos. Empezó su andadura en el fútbol siendo director deportivo del modesto equipo holandés Haarlem y después pasó a una agencia de representación de futbolistas (Intermezzo). A partir de ahí edificó su propio imperio haciéndose con jóvenes promesas y moverlas periódicamente por diferentes clubes. Solo con Ibrahimovic negoció ocho traspasos que ascendieron a 169 millones de euros.
Redacción Estrella