El entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, declaró este sábado que se sentía satisfecho con el triunfo sobre el Real Zaragoza (0-2) porque ha explicado que lograrlo tres días después de haber disputado un partido de Liga de Campeones siempre es complicado.
Guardiola señaló que habían intentado disputar un encuentro sin contacto y con mucho movimiento del balón para tenerlo controlado. El técnico barcelonista ha indicado también que a pesar de que la victoria había podido parecer cómoda, el conjunto aragonés fue capaz de igualar un 0-2 en contra en el partido contra el Sporting de Gijón y pudo ganar, y que no se podían fiar de él.
«El partido no se acaba hasta que pita el árbitro. Un despiste, una falta o un córner te pueden costar un gol», ha declarado el preparador del conjunto catalán. Igualmente, Guardiola no dio importancia a la sequía goleadora que atraviesa David Villa, del que dijo que no se le puede juzgar sólo por los goles que consigue.
«Es un jugador que está constantemente en movimiento y sus desmarques nos generan oportunidades como ha ocurrido hoy. Si no marca ya le entrarán», ha comentado. El entrenador del Real Zaragoza, José Aurelio Gay, ha indicado que su equipo había dado la cara, se había esforzado y que le había discutido al Barcelona la primera parte.
«El gol ha llegado en un momento difícil. Hemos jugado un partido de 45 minutos pero el equipo se deja la piel hasta donde llega, aunque es verdad que ya llevamos varios partidos en inferioridad numérica y es una pena porque se podía haber visto una segunda parte más competida», ha destacado.
Gay dijo haber echado de menos hacer bueno el primer pase de los contragolpes para tener opciones de llegar arriba porque cuando robaban el balón intentaban un pase profundo y lo perdían.
De la misma forma se ha lamentado de la expulsión de Leo Ponzio porque considera que, con 0-1, su equipo todavía estaba en el partido.
El técnico zaragocista cree que en los partidos que lleva disputados su equipo todavía no ha conseguido que los once jugadores jueguen un partido completo y den el mismo nivel.
Gay ha señalado que cuando no se gana, que es lo que le ocurre a su equipo, la sensación que se desprende es de dificultad para ganar los partidos, de que se tiene miedo a ganar pero ha alabado que el esfuerzo y la actitud por parte de sus hombres habían sido «mayúsculos».