El delantero hispano-brasileño mete la mitad de los penaltis que tira, aunque en esta ocasión tuvo una especial distracción
Diego Costa fue el autor el pasado domingo del segundo gol del Atlético, que le acercaba más a la Liga. Además en la consecución de ese gol Costa se lesionó al chocar con la tibia en la palo de la portería azulona justo antes de fallar una pena máxima.
No fue fácil anotar ese penalti ya que justo delante de sus ojos, un aficionado azulón le hizo un ‘calvo’, es decir bajándose los pantalones y mostrando su trasero, para intentar distraerlo. Y así fue, Costa erró el penalti y pareció algo desconcentrado.