La Décima, es un título con un gran simbolismo, no solo para los aficionados, sino también para el club y los jugadores, lo que explica el misticismo de la camiseta con el número 10 de esta temporada, la camiseta de La Décima.
Y es que a pesar de ser un número siempre deseado, este año había quedado libre tras la elección de números en la plantilla madridista. Todo empezó en agosto, con una pequeña broma de uno jugadores de la plantilla. Era el número de la Décima. Por tanto, esta temporada nadie podía llevar el 10.
A la plantilla le gustó la idea. Por eso, en su debut en Champions el 17 de septiembre contra el Galatasaray, justo al lado del 9 de Benzema, en el vestuario había una equipación con el dorsal 10 en la espalda y el nombre de “La Décima”. Y lo que empezó como una anécdota se convirtió en un amuleto, una especie de talismán para la plantilla blanca. “La camiseta con el dorsal 10, nos ha acompañado esta temporada en cada partido».
Antes de los encuentros, los utilleros la colocan cuidadosamente entre el 9 de Benzema y el 11 de Bale, como si se tratara de un jugador más. Puede que sea algo completamente irracional, pero si hasta ahora nos ha funcionado, ¿por qué lo vamos a cambiar?”.