La temporada de Frack Ribéry a las órdenes de Pep Guardiola ha sido francamente decepcionante. Solo ha participado en 22 partidos en la Bundesliga y, aunque sus estadísticas de goles y asistencias no se han resentido, sus sensaciones han dejado mucho que desear.
Sin embargo, en Alemania pocos ponen en duda el compromiso del francés. El tercer mejor jugador del Mundo en 2013 según la FIFA siempre ha dicho que se siente mucho mejor en Múnich que en su país natal y parece que su compromiso con ‘los Bleus’ ha desaparecido completamente en su madurez.
El médico de la selección dijo que si el jugador hubiese querido podría haber estado en el Mundial a las órdenes de Deschamps, pero al extremo le apetecía más tener unas vacaciones largas, sin tener que pasar por el miedo que le dan las inyecciones. Al día siguiente de renunciar al Mundial, ya se le veía corretear por las playas, mientras no paraba de sonreír.
Pero la cosa no quedó ahí porque parece que el francés intenta mitigar sus dolores con un curioso método. Bild publicó unas imágenes en las que se puede ver al ex del Marsella fumando marihuana junto a un amigo. De hecho, en el reportaje fotográfico se ve como el jugador esconde la sustancia debajo de una toalla, mientras intenta ocultarse de los curiosos en un hotel español.