Los sueldos cada vez más elevados de los futbolistas de primer nivel han permitido que en los últimos tiempos proliferen los coleccionistas de automóviles de lujo en los vestuarios. En el Real Madrid, Cristiano es uno de los más apasionados del motor, hasta el punto de que se gasta 100.000 euros al año solo en asegurar sus coches.
Por su puesto, los gustos de la estrella portuguesa no son nada sencillos. En su garaje se encuentran un Bugatti Veyron, un Lamborghini Aventador, un McLaren MP4-12 Spider, un Maserati Gran Cabrio, un Ferrari 599 GT0 y un largo etcétera que no incluye ni una sola baratija.
Sin embargo, la última elección de Álvaro Arbeloa parece mucho más extravagante. Los futbolistas no pueden montar en moto porque así lo dice el reglamento interno de la mayoría de los clubes, pero si pueden ir en cualquier tipo de coche y Arbeloa ha buscado una opción intermedia para disfrutar del aire fresco.
El defensa del Real Madrid luce un Morgan 3 Wheeler, un vehículo de tres ruedas que esconde un motor V2 de 114 cv. El carro solo pesa 500 kilos, lo que unido a su potencia hacen que sea uno de los automóviles con una conducción y manejabilidad más singular del mundo. Solo existen otros dos modelos como este matriculados en España.
El coche está inspirado en un modelo de 1909, pero cuenta en el interior con un equipamiento a la última. Arbeloa acudió a Valdebebas con gorra, pero aconsejan que se lleve casco en este tipo de vehículos porque a altas velocidades los ojos sufren, aunque no sea obligatorio. El coche llega a los 100 hm/h en 4,5 segundos y tiene una velocidad punta de 200 km/h.