El Real Madrid ha pasado una crisis de juego importante en la que no mostraba el nivel al que se acostumbró su público en la primera vuelta. Ancelotti llevó a su equipo hasta la extenuación y la fatiga quedó a la vista de todos. Sin embargo, la prensa y el público quisieron buscar más culpables y se señaló a Gareth Bale incomprensiblemente.
James y, sobre todo, Isco, son muy del gusto de la parroquia blanca y de muchos periodistas, por lo que intentan hacerles hueco en el equipo titular de cualquier forma. Parece que la manera más fácil de colocarles en el once cuando Modric se recupere es la de ‘sacrificar’ a Bale porque “no entra dentro del estilo de juego de los centrocampistas”.
Bale es ahora el ‘chupón’ más grande del reino, como si el galés estuviese todo el rato protagonizando conducciones eternas como las de Robben o Di María. Se le pone la cruz por no pasar el balón en ocasiones claras en las que sus compañeros ni siquiera estaban en mejor posición que la suya. Puede decirse que cometiera fallos garrafales en la definición, pero no que pecara de egoísta.
Sin embargo, Bale no habla español y tiene muchas dificultades para despertar simpatías en el Bernabéu. Tiene imagen de chico distante y, pese a sus goles en partidos importantes, sus lesiones han impedido que el madridismo le identifique como algo suyo. Por suerte, el ‘expreso Cardiff’ sabe que con él habrá mucha más paciencia que con otros en las oficinas de Concha Espina. Benzema sabe mejor que nadie los frutos que da el tiempo.
De hecho, Florentino sacó la cara por Bale para decir que no le venderán por ninguna oferta, por muy elevada que sea. El dirigente no fue de farol, puesto que es el principal valedor de un fichaje costosísimo que muchos le cuestionaron. Le defiende de cara a la prensa y también en el vestuario. Su abrazo con él al recibir al equipo en el Bernabéu fue mucho más cariñoso que con otros compañeros y saca la cara por el '11' incluso cuando habla con Cristiano. «Cristiano, tenemos que ayudar a Bale porque será el futuro Balón de Oro», le dijo al mejor jugador del mundo en 2014, según publica Voz Populi.
Además, Bale también está muy tranquilo porque cuenta con el apoyo incondicional de su entrenador. Ancelotti ha dicho hasta la saciedad que la ‘BBC’ es inamovible. ‘Carletto’ le defiende siempre en rueda de prensa y está convencido de la capacidad de Bale para reponerse. «Dudo que Bale esté preocupado por los silbidos», dijo el entrenador para zanjar definitivamente el tema.