La Asociación Valores del Madridismo cree que el Real Madrid debería ofrecer el Santiago Bernabéu como sede de la final de la Copa del Rey entre el FC Barcelona y el Athletic Club, que se disputará el 30 de mayo, y solicitó a las instituciones públicas que recomienden a las aficiones que respeten el himno nacional.
En un comunicado, AVM manifestó «históricamente» la política del Real Madrid ha sido la de «ofrecer su estadio como punto de encuentro para cuantas competiciones se disputen». «La AVM entiende que el Real Madrid debe mantener esta postura de acercar en lugar de alejar; de sumar, en lugar de restar», añade.
En este sentido, subrayó que por los precedentes de las dos finales anteriores, en las que se pitó al himno nacional y al Rey, solicita que se recomiende a ambas aficiones por parte de las instituciones gubernamentales y deportivas «el mismo respeto a los símbolos de todos como el que les gustaría que todos tengan por los suyos».
«Nadie obliga a ningún equipo a jugar un torneo con el que no se sienta identificado. Por ello 'Valores del Madridismo' reclama un compromiso público para que el respeto cívico y protocolario a los símbolos de la competición o de los rivales no se pierda», señala.
Así, Valores del Madridismo considera que abuchear un himno nacional «no es manifestación del derecho a la libertad de expresión» sino una clara «falta de respeto» a un símbolo colectivo y un «insulto gratuito» hacia muchas personas que se sienten representadas por él.
«Aprovechamos la ocasión para invitar a las autoridades competentes a que, independientemente de donde finalmente se dispute la final, adopten las medidas oportunas para actuar contra estas conductas intolerantes y ofensivas. Se ha iniciado una política correctiva muy beneficiosa en general, que animamos tenga continuidad», destacó.
Por último, dicha asociación señaló que las reivindicaciones de los aficionados del Barça y Athletic no deben dirimirse en un escenario como la final de Copa. «La AVM, al igual que todo el madridismo, desea que este partido sea una fiesta del fútbol español de la que todos disfrutemos, pero está en su derecho de no ofrecer su casa para algo distinto a esta sana pretensión», concluyó.