Bravo, uno de los mejores del mundo (7). No pudo hacer nada en los goles que recibió. Salvó un mano a mano impresionante a Gameiro. Está rapidísimo y juega con el pie como el mejor de los centrocampistas. No tiene el reconocimiento mundial que merece.
Sergi Roberto, notable lateral (7). Demostró que, además de tocar bien el balón, tiene un buen físico para esa posición. Llegó mucho a línea de fondo y no descubrió su carril como suele hacer Alves. El Sevilla se empeñó en atacar por su lado y encontró el premio por el otro perfil.
Jordi Alba, lejos de su mejor nivel (5). Su fuerte es la velocidad y en eso también le ganó Gameiro en la tarde de este sábado. No tuvo la proyección ofensiva de otras ocasiones.
Piqué, mejor defensa que delantero (6). Incompresiblemente no empujó un balón que quedó muerto en la línea de gol. No se puso nervioso ante los pitos. Tocó bien el balón y fue más contundente que el resto de sus compañeros de zaga.
Mathieu, impropio del Barça (3). Se vio superado por Gameiro durante todo el partido. Vio una amarilla y no supo jugar con ella. Salió a cubrir a Jordi Alba en el primer gol hispalense, no se atrevió a entrar y dejó a su par libre para que rematará en el área. Luis Enrique le señaló con el cambio.
Mascherano, correcto en su papel de pivote (6). Tocó siempre rápido y guardó el sitio, aunque el estilo de juego del Sevilla no le dejó lucir.
Busquets, mejor acompañado (6). Jugó mejor con Mascherano al lado y pisó área en algunas ocasiones. Luchó muchísimo y se le vio más motivado que en partidos anteriores
Rakitic, sublime (8). Distribuyó de maravilla y se creció sin Iniesta. Tenía que dar el último pase y firmó varios pases al hueco de muchísimo nivel. Volvió a casa y firmó uno de sus mejores partidos desde que se fue.
Neymar, una maravilla (9). Solo Sergio Rico le freno. Regateó a todos los rivales que le salieron a su pasó y se entendió muy bien con Luis Suárez. Tuvo la valentía de volver a tirar un penalti y buscó muy bien a Luis Suárez.
Munir, intrascendente (3). Prácticamente ni la tocó cuando su equipo dominó el partido. El año pasado surgió como una gran sensación, pero va camino de quedarse estancado.
Luis Suárez, omnipresente hasta en sus peores días (6). No se cansó de intentarlo, aunque no estuvo nada fino con la definición. Sí asistió a sus compañeros en varias jugadas y nunca se escondió.
Luis Enrique, solo el resultado le quita la razón (6). Sacó a un equipo mucho más equilibrado que en Champions. Pudo confiar en Bartra en lugar de Mathieu, pero supo motivar a los suyos con los cambios y el equipo mostró mucho carácter.
Dani Alves, a favor de corriente (6). Se encontró cómodo porque no tuvo que defender en el rato que jugó. Metió varios centros peligrosos, pero el Sevilla se encerraba ya con mucha gente.
Sandro, muy participativo (6). Mando un balón al poste al tirarse al suelo con mucho carácter. Está más hecho que Munir, pero siente la presión de sustituir a Messi. Pidió el balón permanentemente.