El poderío económico del jeque Nasser Al-Khelaïfi ha conseguido colocar al PSG en una posición privilegiada dentro del fútbol Europeo. ‘Les Parisiens’ se han llevado las últimas ligas francesas y han conseguido colocarse como una de las principales alternativas al triunfo de Barcelona y Real Madrid en la Champions League. Sin embargo, David Luiz y Cavani sienten miedo y no quieren volver a la disciplina de su equipo.
El equipo ha conseguido atraer a grandes estrellas a sus filas en los últimos años, pero varios futbolistas se plantean no regresar de la capital francesa porque, tras los últimos atentados que terminaron con la vida de unas 130 personas el pasado viernes, sienten que su seguridad no está garantizada.
La Eurocopa se celebrará en Francia en 2016 y muchos jugadores temen que el fútbol se pueda convertir en un objetivo de los yihadistas por este motivo. El Stade de France ya vivió momentos de pánico en el último Francia-Alemania y el temor a que esto se pueda repetir en partidos de clubes paraliza a muchos deportistas.
Esta semana de selecciones catorce futbolistas del líder indiscutible de la Ligue One estuvieron con su selección. David Luiz viajó con Brasil, Di María, Pastore y Lavezzi fueron con Argentina, Cavani estuvo con Uruguay, Serge Aurier fue con Costa de Marfil, Ibra, con Suecia; Kevin Trapp, con Alemania, Salvatore Sirigu, con Italia; Matuidi vivió el caos en Saint Denis y Kimpembe, Rabiot y Augustin estuvieron con las categorías inferiores de la ‘bleu’.
Muchos de ellos se alegraron de no estar en París en un momento tan delicado. De hecho, el central brasileño David Luiz expresó tras el partido que enfrentó a ‘la Canariha’ con Argentina su deseo de quedarse en Brasil por lo sucedido. “Tengo a mi novia, a algunos amigos y a parte de mi familia en París. Todos están muy tristes y asustados. No sé lo que voy a hacer y si voy a regresar. Jugar en el PSG es mi trabajo, pero si fuera por mí no volvería” , aseguró el defensa que costó 50 millones de euros en 2014.
Por otra parte, el futbolista uruguayo Álvaro González señaló que Edinson Cavani también está muy afectado por lo sucedido. “Cavani me comentó que si tenía que volver ahora a París prefería no hacerlo”, dijo el centrocampista ante la prensa.
Los jugadores de todo el mundo, muy afectados por lo ocurrido
En cambio, los jugadores argentinos del PSG mostraron sus condolencias a las víctimas en las redes sociales y en un primer momento Di María se mostró preocupado por los problemas que se podría encontrar en su regreso. «Es algo difícil de explicar. Por suerte, mi familia no estaba ahí, pero esto debiera dejar de pasar porque muere mucha gente inocente. Estoy preocupado porque, por lo que me enteré, nadie puede entrar ni salir de Francia. Ojalá que se pueda solucionar rápidamente», señaló ‘el Fideo’. Además, Marco Verratti que no acudió con ‘la Azzurra’ por lesión “no tiene miedo” y quiere “volver a la normalidad” cuanto antes, según su representante.
Recemos por París #PrayForParis pic.twitter.com/j6T8MNYuTc
— Ezequiel Lavezzi (@PochoLavezzi) noviembre 14, 2015
Por otro lado, Sergi Roberto y Xavi Hernández han sido los futbolistas español que han vivido más de cerca esta tragedia, puesto que los dos se encontraban en París el viernes por la noche. El joven futbolista culé se encontraba de viaje con sus amigos, pero el día de la tragedia tuvo que irse pronto al hotel porque un gendarme francés se lo pidió. El sábado hizo turismo con normalidad. Además, su excompañero de equipo tampoco vivió una noche muy agradable. Xavi iba a acudir al Stade de France como invitado de Adidas al Francia-Alemania, pero su mujer se sitió cansada a causa del embarazo y los dos escucharon atemorizados las explosiones desde la suite de su céntrico hotel.
Por último, el fútbol demuestra que en este tipo de desgracias las religiones se deben unir para luchar contra los más radicales, puesto que los jugadores musulmanes han sido los primeros en condenar los sucedido. Shkodran Mustafi, Hedo Turkoglu, Frederic Kanoute y Yaya Touré fueron de los primeros en expresar sus condolencias.