Bravo, importante (6,5). El chileno realizó intervenciones de mérito ante Bakambu y Bailly. En los goles, poco pudo hacer. En el primero detuvo el remate de Denis; el segundo fue una acción desafortunada de Mathieu.
Roberto, a ratos (6). Hoy al canterano le tocó de lateral. Se asomó en contadas ocasiones al ataque, pero atrás estuvo acertado. Después, en el centro del campo, contribuyó a la última reacción de su equipo.
Piqué, regular (5). El central se vio superado por Bakambu en la primera acción del partido. Debió ser expulsado por arrebatarle con la mano un balón a Denis. Mandó en la zaga y sacó bien el balón, pero no estuvo a la altura atrás.
Mascherano, correcto (6,5). El argentino cortó varias acciones peligrosas del Villareal. Rápido y al cruce, impidió que jugadores como Trigueros o Soldado hicieran más daño.
Alba, atento (6). El lateral acompañó en labores ofensivas pero no descuido la defensa. No fue un futbolista clave, pero no tuvo culpa en los goles.
Busquets, sin protagonismo (5,5). El equipo local supo frenarle. Marcelino colocó varios hombres en el medio para propiciar que el Barcelona sacara el balón por la banda. Se vio poco al mediocentro.
Rakitic, ofensivo (7). El croata anotó el primer tanto de su equipo y pudo hacer muchos más. Un peligro constante para la zaga del Villareal. Mucha llegada.
Arda, poca cosa (4). El turco fue amonestado y no tuvo gran peso en el partido. No termina de adaptarse al juego azulgrana, a pesar de que en las últimas jornadas había anotado.
Neymar, sangre fría (8). Batió a Asenjo ‘a lo panenka’ pese a la maldición de su equipo desde los once metros. Demostró desequilibrio y pudo haber sentenciado el choque. El mejor de los tres de arriba.
Messi, espeso (6). El argentino apenas creó peligro. Poca velocidad y sin disparos a puerta. Su mejor acción, la asistencia al brasileño que provocó el penalti y posterior segundo gol.
Suárez, apagado (5). El uruguayo atravesó una de sus peores noches. Se dejó ver en alguna contra, pero apenas puso en aprietos a la zaga amarilla.
Enrique, mal (4). Sus tempraneros cambios en defensa provocaron un despiste en el equipo que coincidió con el auge del Villareal. Muy poco acertado en su planteamiento.
Mathieu, desafortunado (4). El central saltó al césped y pronto se metió un gol en propia puerta. No aportó la seguridad de otras ocasiones. Rápido al cruce, pero poco más.
Alves, sin sitio (5). El lateral, suplente otra vez, no ayudó a que su equipo reaccionara. No fue un arma ofensiva y atrás no ayudó a los centrales. Su entrada coincidió con los goles.