El Barcelona, el Atlético de Madrid y el Real Madrid siguen con sus opciones de ganar la Liga intactas durante una semana más. El problema para los clubes madrileños es que cada vez son menos las semanas que faltan para que el actual líder falle, aunque nadie da nada por perdido a estas alturas, después de haber estado a ocho y a doce puntos de los de Luis Enrique hace pocos meses.
Sin embargo, las opciones de los de Zidane de ganar esta Liga empiezan a ser demasiado remotas. Todo parece indicar que ninguno de los tres equipos perderá ni un solo punto en los dos últimos partidos. Puede haber una sorpresa, pero que se den dos juntas se antoja verdaderamente complicado. El Madrid necesita casi un milagro, ganar al Valencia en el Bernabéu y al Deportivo de la Coruña en Riazor. Los dos pueden llegar a jugar contra los blancos sin jugarse absolutamente nada, pero nunca se lo han puesto fácil históricamente. Los de Chamartín ya empataron en Mestalla este mismo año en el último partido de Benítez al frente de la nave merengue y no ganan en casa a los chés en Liga desde el 2010, por no hablar de la racha de 18 temporadas sin vencer en La Coruña que se rompió en los últimos años.
Por su parte, el Atlético de Madrid jugará la semana que viene frente al Levante en el Ciudad de Valencia, un estadio que tampoco se le da demasiado bien, aunque el conjunto granota puede llegar con la salvación prácticamente perdida, si no consigue ganar este lunes al Málaga en La Rosaleda. Asimismo, el Celta puede llegar con opciones de jugar la Champions, si el Villareal pierde algún punto, pero necesita ganar antes al Athletic y al Málaga.
Sin embargo, la lucha por el descenso afectará todavía más al Barcelona, aunque el Sevilla se convierte sin quererlo en un juez indirecto en todo este asunto. El equipo hispalense juega este domingo frente al Espanyol y si gana meterá de lleno a los blanquiazules en el fango. Además, en la jornada 37 los de Emery juegan frente al Granada, que tras vencer al Las Palmas este sábado podría salvarse a falta de una fecha para el final si gana en el Sánchez Pizjuán.
El pasado siempre vuelve
En cualquier caso, los pericos no van a regalar nada y los fantasmas de la primas a terceros revolotearán por todos los campos pase lo que pase. Además, la situación recuerda peligrosamente a la vivida en la temporada 2007/2008 cuando el Madrid de Fabio Capello ganó la Liga del ‘clavo ardiendo’ gracias a un empate del Espanyol en el Camp Nou con un gol de Raúl Tamudo en los últimos minutos. Los vecinos de la ‘maravillosa minoría’ tendrán muchas ganas de fastidiarle la Liga al Barcelona. Además, para añadirle algo más de morbo al asunto Asensio y Burgui, cedidos por el Real Madrid, también intentarán echarle una mano al club al que pertenecen.
El Barcelona no ha mostrado en las últimas fechas una gran frescura ofensiva, a pesar de las goleada frente al Sporting y Deportivo de la Coruña y jugará contra un equipo que en la primera vuelta ya le arrancó un empate al mantener su puerta a cero. Todo volverá a depender de la chispa que muestren Messi, Neymar y Suárez el próximo domingo a las 17:00 cuando se jugará la jornada en horario unificado.
Por otra parte, la lesión de Claudio Bravo, que se retiró en los últimos minutos del partido frente al Betis con molestias en el gemelo también puede condicionar mucho el final de la Liga. Todavía no se conoce exactamente el alcance de la lesión del chileno. No parece grave, pero si finalmente no puede disputar el siguiente partido, Ter Stegen ocupará su lugar. El alemán no dio la misma seguridad a sus compañeros en los partidos ligueros que tuvo que disputar en la primera vuelta y recibió siete goles en tan solo tres choques. No obstante, el Barcelona llegará mucho más descansado que sus rivales a la siguiente jornada, puesto que el Madrid y el Atlético tienen que jugar las semifinales de la Champions esta semana. Además, los blancos pueden tener también bajas sensibles contra el Valencia.