El culebrón del verano ha llegado a su fin. Paul Pogba no fichará por el Real Madrid y Zidane se tendrá que conformar con cualquier otro mediocentro defensivo. El joven futbolista francés recalará en el Manchester United, tal y como ha confirmado el club en un comunicado oficial.
La Juventus ya le ha dado permiso al gigante inglés para que Pogba pase el pertinente reconocimiento médico. De hecho, el ManU ha decidido darle al fichaje la máxima repercusión y ha propuesto el hashtag #PaulBack para anunciar la operación.
No obstante, el fichaje no se registrará hasta este lunes, ya que el club cotiza en Wall Street y tiene que registrar allí sus operaciones. No obstante, La Gazzetta dello Sport ya adelanta que el Manchester pagará 110 millones de euros por esta operación.
De hecho, el rotativo italiano ya adelantó en la mañana de este domingo que Pogba había llegado a Manchester en la «semiclandestinidad». El futbolista ya estuvo en el club entre 2009 y 2012, cuando solo era una promesa, pero la negativa de Ferguson a darle un papel importante en la primera plantilla le animó a pedir que le abrieran la puerta.
Por eso, la Juventus ha hecho el negocio perfecto, puesto que lo contrató libre hace cuatro años y le sacó rendimiento muy rápido hasta que se convirtió en una de las estrellas más codiciadas del mercado. El Real Madrid siempre estuvo tras sus pasos, pero la discreta Eurocopa que disputó este verano en su país no animó a Florentino Pérez a realizar una inversión que muchos de sus aficionados consideraban excesiva para un jugador de sus características.
José Mourinho ya anunció hace unos días que su plantilla quedaría cerrada esta misma semana y el portugués no ha faltado a su palabra. El exmadridista tendrá una plantilla mucho más competitiva que la que entrenó Van Gaal el año pasado y ya es uno de los grandes favoritos para hacerse con la Premier, gracias a la colaboración del representante Mino Raiola, que ha puesto a su disposición a sus dos principales cracks. El club ya se ha impuesto este mismo domingo en la final de la Community Shield al Leicester (1-2) gracias a un tanto decisivo de Ibrahimovic.
Felipe Poza