Keylor, sin la confianza del año pasado (3). Ya falló frente al Dortmund y este miércoles volvió a conceder un gol en el que el balón le pasó por debajo de los brazos. No pudo hacer nada en los otros dos tantos, pero tras su lesión no ha vuelto a dar la misma seguridad.
Carvajal, acelerado (4,5). Hizo varias faltas innecesarias por exceso de ímpetu. Intentó muchísimas cosas, pero solo le salió la asistencia del gol final de Kovacic, en una jugada demasiado improvisada.
Coentrao, mareado (3). Su par le volvió loco en una jugada en la que se pidió penalti, aunque realmente no lo fue. No tuvo presencia en ataque y sufrió en todas y cada una de las llegadas del Legia.
Nacho, un gran profesional (6). Volvió a rendir a pesar de que solo juega cuando el resto no están sanos. Se fue al suelo en varias ocasiones para cortar jugadas peligrosas, pero no pudo tapar todos los espacios que dejan sus compañeros. Su único pero estuvo en los disparos desde el borde del área en los que estuvo algo contemplativo.
Varane, irreconocible (5). También miró demasiado en varias jugadas en las que sus rivales tuvieron mucho tiempo para disparar. No tuvo ningún error de peso, pero ya no ofrece la sensación de grandeza de años anteriores. Tiene que mandar mucho más.
Kroos, correcto (6). El centro del campo no existió durante el partido y por eso perdió mucho peso, pero cuando entró en contacto con el balón distribuyó con criterio y fue de los pocos que mantuvo el sitio.
Kovacic, en todas partes (9). Estuvo muy bien en la presión y aportó en tareas defensivas. Su asistencia en el gol de Benzema fue una delicia y definió bien en su tanto.
Bale, un golazo mayúsculo y demasiados tiros (6). Solo aprobó porque un gol como ese vale muchos puntos, pero por lo demás tiró en demasiadas ocasiones con muy poca puntería y abusó de la fuerza en los centros.
Cristiano Ronaldo, sin ninguna calma (2). Vive más obsesionado que nunca en torno al gol. Este miércoles lo buscó de todas las formas. Dejó algunos taconazos horribles y no combinó demasiado con sus compañeros en zonas de peligro.
Morata, titular sin chispa (4). Todo lo que hace cuando sale desde el banquillo se quedó en nada al jugar acompañado de toda la BBC. No encontró su sitio y prácticamente ni tiró a portería.
Benzema, un cambio incomprensible (6). No fue su mejor partido, pero si es cierto que entre los atacantes fue el que mejor supo interpretar la llegada de segunda línea y eso fue lo que le llevó al gol. Como siempre, no derrochó ganas, pero tampoco se entiende que Zidane decidiera sustituirle a él en primer lugar.
Zidane, su mayor fracaso (1). Como ya hizo Del Bosque en su tiempo, quiso meter a todos los jugadores reputados con calzador y se encontró un desastre táctico. No supo rectificar cuando estaba a tiempo y metió más atacantes cuando el partido exigía precisamente lo contrario. Esto le servirá para no volver a jugar nunca con este esquema y los madridistas esperan que este sea el partido tonto del equipo en Champions que últimamente protagoniza todos los años. Llevó a sus jugadores al desorden más absoluto.
Lucas Vázquez, un disparo al larguero (5). Ni siquiera un todoterreno como él supo lo que tenía que hacer con un estilo de juego tan anárquico. No participó mucho, pero estuvo cerca de marcar en el último minuto.
Asensio, siempre positivo (6). Tampoco tuvo tiempo para influir demasiado, pero cuando tuvo la oportunidad aportó la calma que le faltaba al equipo, aunque con eso no fue suficiente para remontar.
Mariano, con ganas (5). Salió a comerse el césped, pero solo pudo tocar un par de balones y no llegó a rematar ninguno de los centros que el equipo metió en el área a la desesperada en los últimos instantes.
Felipe Poza