Tras el cómodo triunfo del Barcelona (6-1) frente al Sporting, se esperaba en las inmediaciones del Camp Nou una rueda de prensa sin sobresaltos. Efectivamente no hubo tensión, pero sí noticia. Por sorpresa, Luis Enrique ha anunciado que no seguirá al frente del equipo azulgrana la próxima temporada.
Así, en mitad de su discurso, ha reconocido que con este tercer año concluirá su etapa al frente del Barcelona, donde ya marcó época como jugador. Cuestionado tras la abultada derrota ante el PSG en Champions, el técnico nacido en Gijón parecía haber hallado la calma tras situarse, de forma provisional, como líder de la Liga.
Y es que el motivo no apunta a una falta de confianza o de fe en el futuro del proyecto, sino a una necesidad de descsnso, como el mismo ha reconocido. Motivación, de momento, parece que le sobra: «Me quedan tres meses apasionantes para pelear en todas las competiciones».
Así, tras un plácido envite, Luis Enrique ha dejado a todos con la boca abierta. Pese a las críticas recibidas, el técnico azulgrana ha conquistado ocho títulos en dos años. Tras la conparecencia, y explicar que no renovará, como mucho podrá llegar a once.
Redacción