Vencer y convencer son dos aspectos que a día de hoy no terminan de florecer en el Bayern de Múnich. A pesar del triunfo cosechado la pasada jornada en la Bundesliga ante el Leverkusen, el conjunto dirigido por Carlo Ancelotti no termina de convencer ni de estar a la altura que se esperaba a principio de temporada. La ‘crisis’ que sufre el equipo bávaro tiene su raíz en el encuentro de la segunda jornada de Champions, donde cayeron en el Vicente Calderón ante el Atlético de Madrid por 1-0 el pasado 28 de septiembre.
De hecho, antes de este tropiezo en el Manzanares, la última derrota del Bayern se dio en el choque de ida de semifinales de la pasada edición de la máxima competición continental, donde el escenario y el resultado fue exactamente el mismo: el Atlético derrotó por 1-0 al Bayern, dirigido entonces por Pep Guardiola, y con el Calderón como testigo de una noche mágica para la parroquia colchonera.
La escasez de victorias, clave en la ‘crisis’ bávara
Desde la derrota ante el conjunto de Simeone en la fase de grupos, los pupilos de Carletto han sumado tan solo tres victorias de los últimos nueve encuentros oficiales disputados. En condición de local han empatado dos, ante el Colonia y el Hoffenheim, y ha salido victorioso en uno, ante el Mönchengladbach; mientras, en condición de visitante, ha encajado un empate ante el Eintracht, dos derrotas ante Borussia Dortmund y Rostov (partido de Champions que acabó 3-2 a favor del conjunto ruso) y tan solo una victoria, ante el Augsburgo.
El liderato se resiste en las grandes competiciones
En la Bundesliga el Bayern ocupa la segunda posición en la clasificación por detrás del Leipzig, equipo revelación que continúa invicto en la competición y que encadena siete victorias consecutivas. Además, la dura derrota que el conjunto bávaro sufrió en Rusia ante el Rostov y la victoria del Atlético de Madrid ante el PSV en el Calderón, hicieron que los rojiblancos se clasificaran para octavos de final de Champions como primeros de grupo.
Ambos equipos se verán las caras en el Allianz Arena en el último encuentro de dicha fase de grupos, pero se tratará de un partido descafeinado debido a que la clasificación ya quedó cerrada la pasada jornada. Eso sí, en el caso que Ancelotti gane el pulso a Simeone, debería servir como punto de partida para recuperar la ambición y el buen fútbol que le permitan al Bayern volver a mostrar su mejor versión tanto en la competición doméstica como en la Champions.
Todavía no hay nada decidido
Queda mucha temporada y el conjunto muniqués aún está a tiempo de revertir la situación por la que atraviesa y volver a ser el ‘rey’ de la Bundesliga como lo lleva siendo durante los últimos años. Las metas principales del Bayern son las de prolongar su hegemonía en Alemania y volver a levantar la ‘Orejona’, como ya hizo en 2013 con Heynckes en el banquillo.
La mejora en todos los aspectos es vital para que el titán germano vuelva a rugir tanto a nivel nacional como continental y, ante el Mainz y el Atlético de Madrid, tiene la oportunidad de reencontrarse con la mejor versión que en su día hizo temer a media Europa.
Es cierto que Guardiola fracasó en Champions con el Bayern, ya que en sus tres años al frente del conjunto bávaro fue apeado en semifinales por Real Madrid, Barça y Atlético y es por ello que la principal tarea de Carletto es la de superar las cifras de Pep y conquistar la sexta Copa de Europa, que se le resiste desde hace tres años y que tanto ansia la afición del Allianz Arena.