Durante ciento veinte minutos de dominio absoluto de España, las gradas del estadio Education City silvaron a los del cuadro español haciendo insuficiente su dominio del juego y su ilusión de ganar.
El dominio español se comenzó a notar desde los primeros minutos del encuentro bajo una selección marroquí que mantuvo un nivel de intensidad elevado y una disciplina defensiva parecida a la que usó Japón contra España, cerrando huecos e imposibilitando crean jugadas de peligro a La Roja.
En la primera parte, casi se adelantó el combinado del norte de África con un remate de cabeza de Aguerd. España, también tuvo alguna ocasión de peligro en el primer tiempo. Una ocasión de Asensio que se fue al lateral de la red y otra de Ferran Torres que estaba en fuera de juego. El primer tiempo se resumió en un juego dominante del conjunto español y una Marruecos bien estructurada y que no pensaba dar su brazo a torcer.
El segundo tiempo fue muy parecido al primero en cuanto a dominio y estilo de juego de España. Marruecos siguió apostando por mantener un bloque defensivo bajo e intentando generar peligro mediante contraataques rápidos, buscando encontrar los huecos que España dejaba atrás. Aun así, España, gozó de algunas ocasiones de peligro muy claras hasta los últimos minutos de descuento, cuando Pablo Sarabia estrello en la madera un remate a un centro.
España no consiguió marcar en la prórroga y acabó en penaltis
La ocasión más clara la tuvo Marruecos en un mano a mano de Cheddira con Unai Simón que consiguió aguantar al atacante y paró con la pierna. El guardameta de la selección española permitió mantener el resultado a cero y llegar a los penaltis.
Los penaltis son una lotería y hoy quedó más que demostrado. Le tocó a España comenzar lanzando y falló Sarabia. Por parte de Marruecos, no fallaron salvo el tercer penalti tirado por Benoun y dio esperanzas a La Roja. Busquets, tiraba el penalti que podía cambiar todo pero también erró el disparo. Hakimi se convirtió en el verdugo de España con un penalti lanzado a lo panenka.
Con esta derrota, la selección española se vuelve a casa eliminada y Marruecos se enfrentará al ganador del duelo entre Portugal y Suiza.