Jorge Lorenzo se ha proclamado campeón del mundo de MotoGP por tercera vez en su carrera, tras los títulos cosechados en 2010 y en 2012. El piloto mallorquín mantuvo su primera plaza frente a las Honda de Marc Márquez y Dani Pedrosa y obtuvo el triunfo en el circuito de la Comunidad Valenciana. Valentino Rossi, que escaló hasta la cuarta plaza, se quedó a las puertas de su décimo título.
Desde el comienzo los dos protagonistas ejercieron sus planes a la perfección. Lorenzo, con una gran salida, mantuvo la primera plaza. Y desde ahí, comenzó a tirar sin mirar atrás, con Márquez y Pedrosa sin perderle de vista. Rossi, aferrado a la esperanza de que las Honda superarán al español, comenzó su progresión.
Tras la primera curva, el italiano ya se había colocado decimosexto, tras adelantar a varios pilotos. En la cuarta vuelta, tras la caída de su compatriota Iannone, ya era noveno. Después rebasó a Smith y a Petrucci, que se abrió en la curva de forma descarada, otorgándole la séptima plaza a su compatriota.
En cabeza, Pedrosa se descolgaba y ponía todavía más difícil el Mundial a Rossi. La victoria quedaba en manos de Lorenzo y Márquez, que seguían separados por un segundo, sin probar el adelantamiento el piloto catalán. El italiano, más allá de Dovizioso sólo tenía españoles delante (Aleix y Pol espargaró más los tres ya mencionados), y fue el hermano mayor el que presentó mayor batalla, pese a que acabó sucumbiendo.
Tras superar a Dovizioso y a falta de 17 vueltas, Valentino alcanzaba su máximo, cuarto, a 11.3 de Pedrosa, un objetivo que se antojaba imposible. Los ojos de los 110.000 aficionados citados en el circuito de Cheste se dirigían hacia la parte delantera de la carrera. Y con razón, ya que con el paso de las vueltas Pedrosa recuperaba el ritmo que había perdido.
Dani comenzó a bajar sus cronos hasta engancharse a falta de tres vueltas. Márquez se mantenía pegado a Lorenzo y terminó defendiendo su segunda plaza ante los ataques de Pedrosa y sin oponer obstáculos a Lorenzo, que tomaba aire y cruzaba primero la línea de meta para conquistar su tercer Mundial en la categoría reina.