El cambio de la previsión meteorológica, donde ahora sólo se espera un radiante sol, es la única noticia grata para Nico Rosberg de cara a la última prueba del Mundial. La superioridad de Lewis Hamilton en los libres, la probable irrupción de Red Bull el domingo, las buenas salidas de los Ferrari y la exigencia del circuito de Yas Marina con el motor, son algunos de los obstáculos a los que deberá hacer frente al alemán para plasmar en el asfalto el favoritismo que le otorgan sus doce puntos de ventaja.
Rosberg, favorito
Este domingo el semáforo en rojo se apagará por última vez en la cita de Abu Dhabi, escenario que será testigo de la batalla por el Mundial. Todos los focos se centran en la figura Rosberg, que ansía despojarse de esa etiqueta que le define como el piloto con más victorias en su haber sin haberse proclamado jamás campeón. Las cuentas le salen al alemán, al que un tercer puesto le sirve para contrarrestar un hipotético triunfo de su compañero y rival Hamilton.
Los precedentes son muy favorables a Rosberg, que hace unos días recibió la gratificante noticia de la meteorología. No lloverá, ni sábado ni domingo, como sí se esperaba hace diez días. Pero no todo iban a ser buenas noticias para el germano, que ha comprobado en los primeros entrenamientos libres de este viernes como el británico no ha perdido un ápice de confianza. 79 milésimas más rápido ha sido, exactamente, Hamilton.
Red Bull, la amenaza del alemán
Aunque el mayor quebradero de cabeza Rosberg ahora mismo se llama Red Bull. La escudería australiana aún marcha lejos de Mercedes, pero siempre suelen avanzar a lo largo del fin de semana, algo con lo que cuenta Verstappen: “Tenemos que mejorar algunas cosas, pero no estamos tan lejos”. Palabras que ha refrendado su compañero de equipo Ricciardo. “Mercedes está delante, pero quizás podamos pelear con ellos el domingo”.
Desde Red Bull saben que batirles en calificación será una ardua tarea, pero una segunda línea tampoco les dejaría en un mal lugar. Ambos pilotos, sobre todo Verstappen, saldrán agresivos y podrán rebasar a un Nico que evitará cualquier tipo de impacto que pueda desvanecer sus opciones. Lo malo para el alemán es que detrás estarán también los Ferrari, que si bien han cuajado un año desastroso, han firmado salidas para el recuerdo.
Una salida sin incidentes, y en la que sólo sea rebasado por los dos Red Bull, esa es la premisa a la que cedería el alemán. Una vez atravesada la primera curva, como ha mencionado Villeneuve, “todo estará resuelto”. Y es que adelantar en el circuito de Yas Marina no es tarea sencilla. No obstante, hay otro inconveniente con el que sí o sí se ha de lidiar Rosberg, y es la fiabilidad. El fuerte calor, la humedad, el contraste de horarios y la larga recta principal donde se va a fondo durante catorce segundos pondrán a prueba el estado de su motor. Y ahí, Mercedes se ha mostrado vulnerable este curso. La tensión crece en la figura de Rosberg, que está a 305,470 kilómetros de proclamarse campeón del Mundo
Alberto Puente