Eric Boullier, jefe deportivo y principal apoyo de Fernando Alonso en McLaren, coincide con el asturiano y Hasegawa en que no se encuentran donde esperaban a estas alturas. Desde que McLaren-Honda diera luz a su proyecto, se fijo el 2017 como fecha para apuntalar al Mundial, un pensamiento avalado por el cambio de normativa, y que se ha descartado según se ha echado encima la fecha. La confianza, el optimismo en el proyecto, sí se mantiene para cursos venideros.
Sin esperanzas para el 2017
El optimismo, seña de identidad de McLaren-Honda desde que se embarcaran en su alianza hace dos temporadas, se ha desvanecido de cara a este 2017, pese a que aún no han arrancado los test de pretemporada en Barcelona, fijados para finales del mes de febrero. No existen los milagros, y desde dentro ya no esconden que el podio será una quimera en esta nueva temporada, después de mostrar un ritmo dos segundos más lento que Mercedes en el Gran Premio de Abu Dhabi, último de 2016.
Primero fue Alonso, que para hablar de su inexistente rivalidad con Vandoorne señaló que no estaban en disposición de pelear por el campeonato, y ahora ha sido su mayor aliado en la escudería, Eric Boullier. El jefe deportivo de McLaren ha confesado a la web estadounidense MotorSport que no están donde esperaban. “No estamos contentos con donde estamos hoy”, ha expresado el francés.
Una opinión similar también a la de Hasegawa, líder de Honda y culpable de los problemas que ha tenido la escudería británica con la unidad de potencia: «Estamos medio felices, y por supuesto no estamos satisfechos con nuestra posición actual. Nuestro personal está animado y hace un trabajo muy bueno, pero por supuesto que no podemos estar satisfechos con nuestra posición actual».
Optimismo de cara al futuro
El objetivo de la escudería británica siempre fue brillar en 2017, a merced del cambio de normativa, algo que ya se sabe que no será posible. De lo que sí alardean es de trabajo y evolución, eso que les ha permitido pasar de apenas finalizar carreras en 2015 por falta de fiabilidad, a por momentos erigirse en la cuarta mejor escudería en 2016. “Sabemos que estamos en movimiento, cerrando la brecha e incluso carrera a carrera podemos tener algunas diferencias, pero generalmente la tendencia durante los últimos años muestra que nos estamos acercando”, ha confesado Boullier.
Pese al varapalo, esperado en cierto modo por la complejidad que atañe llegar y triunfar en el ‘gran circo’, y sin embargo motivado por las desmedidas expectativas enfundadas por ellos mismos, el equipo no pierde la ilusión de cara al futuro, y confía aún en sus posibilidades de conquistar el Mundial en no mucho tiempo. “Queremos ganar carreras a corto plazo, no a largo plazo”, ha dicho Boullier, que ha incidido de nuevo en que “hay algo de progreso” y que saben donde tienen que estar “para ganar”. De momento, en 2017, no cumplirán con las expectativas.
Alberto Puente