Bernie Ecclestone ha sido cesado recientemente de su cargo al frente de la Fórmula 1. El británico, en cambio, era consciente de que la compra del ‘gran circo’ por parte de Liberty Media se llevaría a cabo tarde o temprano. De ahí que junto a Briatore, el que fuera jefe de Renault en los años de gloria de Alonso, haya planeado desde 2013 una alternativa conocida como GP1, en la que buscaría captar a escuderías de todos los niveles. Una compleja idea a la altura del magnate.
Liberty Media aparta a Ecclestone
El pasado lunes se hizo oficial una noticia que desde mediados de la pasada temporada merodeaba por el ‘gran circo’: el grupo Liberty Media compró el 100% de las de la Fórmula 1, a excepción de algunas que se pondrán a disposición de los distintos equipos. El presidente y director de este conglomerado se mostró “encantado” con la operación y fió el futuro a Chase: “Este deporte tiene enormes oportunidades de crecimiento” y confiamos en que Chase, con su habilidad y experiencia, es la persona adecuada para conseguirlo”.
Ecclestone no se escondió tras la noticia y confesó que su despido “era oficial”. Le concederán un nuevo cargo, el de presidente emérito, al que él no parece otorgarle demasiada importancia: “Utilizo este adjetivo sin saber que significa». No obstante, trató de restarle importancia a lo acaecido con una frase bastante humorística: “»Tal vez vaya a algún Gran Premio, todavía tengo muchos amigos en la Fórmula 1 y no tengo suficiente dinero para pagarme una visita».
Una ‘nueva’ Fórmula 1
Este despido parece que no ha pillado desprevenido al británico, que desde 2013, según apunta el diario alemán AutoBild, planea una opción alternativa a la Fórmula 1, denominada GP1. Su socio sería Briatore, que este mismo jueves ha demostrado su malestar por la forma en la que han apartado al magnate de su cargo: “Creo que la destitución de Ecclestone no ha sido muy elegante. Bernie ha dado éxito a muchos que no se lo merecían”. El que fuera jefe de Renault también expresó sus dudas respecto a cómo le irán las cuentas a Liberty media en “un mercado difícil”.
Ecclestone busca implantar unos presupuestos más bajos para ganarse el cariño de las escuderías modestas, con motores atmosféricos y un chasis similar al que utilizan actualmente los monoplazas de la GP2. De hecho, su idea es que en esta competición se puedan englobar a escuderías tanto de la categoría citada como de la GP3. Un proyecto ambicioso que, no obstante, necesita de un sinfín de apoyos para poder combatir al ‘gran circo’: patrocinadores, televisiones…
Por el momento parece una quimera, y una vía que no será aceptada por los grandes equipos de la Fórmula 1. El propio Helmut Marko, líder de Red Bull, aseguró que no tienen nada que ver “con planes alternativos” y que ofrecerán todo su apoyo a la Fórmula 1. Lo cierto es que Ecclestone cuenta con 39 años de experiencia en este mundo y con contactos suficientes como para tratar de llevar a cabo la idea, pero la dificultad que entraña robarle protagonismo a la Fórmula 1 hacen que esta opción resulte casi una quimera.
Alberto Puente