La retirada de Rosberg a finales del pasado año abrió un interesante debate en torno a la figura del ‘segundo piloto’. Dos grandes pilotos que siembren un ambiente hostil o un ‘status’ diferenciado para evitar la lucha de egos, emergieron como las dos únicas alternativas a escoger. Mercedes, lejos de tentar a Fernando Alonso o a alguno de los dos pilotos de Red Bull, prefirió sacar a Bottas de Williams a base de talonario. La fórmula, vista la clasificación, ha sido un éxito rotundo. Pese a que el finlandés y su compatriota Raikkonen parecen asumir un papel secundario, ambos se erigen decisivos en la disputa del Mundial.
Las dos escuderías mejor posicionadas de la parrilla lo tuvieron claro el pasado invierno y mantuvieron en sus filas a un líder destacado: Mercedes a Hamilton y Ferrari a Vettel. El objetivo, evitar trifulcas como la que Alonso y el británico protagonizaron en el equipo alemán hace una década. O lo que es lo mismo, contar con un escudero que acepte un rol secundario. El veterano Raikkonen, al que decidieron renovar en Maranello, y Bottas, el hombre al que ha escogido Wolff para los próximos años.
Su papel, alejado de los focos, se puede convertir en esencial cuando prima la equidad. Este 2017 es todo un ejemplo. Que Mercedes está un escalón por encima parece evidente, pero que Vettel marcharía líder si no se hubiera excedido en confianza en Singapur también es una realidad. La clasificación del Mundial de Constructores, en cambio, refleja un abismo difícil de reducir por parte de los italianos: una brecha de 102 puntos entre ambas escuderías. La causa, el rendimiento de los escuderos.
Mientras que Raikkonen es superado en la tabla por un Red Bull, Ricciardo, Bottas amenaza a Vettel. El piloto de Mercedes suma diez podios por los cuatro de su compatriota. Ha cosechado además dos triunfos. Peor lo que es más importante: Bottas ha acabado por delante de Vettel en seis de las catorce carreras celebradas esta temporada. Esto se traduce en que el finlandés le ha restado un buen puñado de puntos al alemán. Raikkonen, en cambio, sólo ha finalizado por delante de Hamilton en tres ocasiones.
Idéntica situación en Moto GP
Algo similar sucede en el motociclismo. Marc Márquez lidera el Mundial con un estrecho margen sobre Andrea Dovizioso, pero el fracaso de Jorge Lorenzo en su primera temporada ha lastrado las opciones de Ducati. Otro ejemplo que pone de manifiesto la importancia de los ‘segundos’ hombres. Juntar a dos gallos en el mismo corral suele generar conflicto, pero apaciguar el ambiente con un piloto de garantías medias puede suponer un mal aún peor. En Mercedes parece que han dado con el piloto idóneo y, de momento, ya anunciaron su renovación hace algunas semanas. Por algo será.
Alberto Puente