La Fórmula E, ya siendo Campeonato Mundial FIA al cien por cien, ha revisado su calendario de cara a la temporada 2023. Para el próximo año, el debut de los monoplazas de tercera generación, se disputarán en principio unas dieciséis pruebas en once circuitos, habiendo varios eventos con carreras dobles. La novedad ha sido la inclusión de un nuevo circuito en Portland, asegurando de esta manera la presencia de Estados Unidos en el calendario. Se trata de un calendario con eventos repartidos por todas partes en el mundo, de modo que solo cuatro eventos se celebrarán en suelo europeo. Eso sí, de esos cuatro eventos europeos tres serán carreras dobles.
Este calendario es una de las múltiples decisiones tomadas el pasado miércoles 7 de febrero en la reunión del Consejo Mundial de la FIA, celebrado esta vez en Bolonia. También se tomaron varias decisiones referentes a otros certámenes como la Fórmula 1, el Mundial de Rallyes, el Mundial de Resistencia, el Mundial de Rallycross o el Mundial de Todoterrenos, que en este 2022 ha celebrado su primera temporada.
En lo que a calendarios se respecta, también se ha definido el calendario de la temporada 2023 del Mundial de Rallycross, de nuevo con diez pruebas puntuables pero tan solo dos citas dobles, las de Ciudad Cabo en octubre y algún lugar por concretar en Asia a finales de noviembre. Por desgracia, el WRX no visitará (en principio, al menos) España, habiendo disputado en el Circuit de Catalunya el RX de Barcelona durante casi todas las temporadas desde 2015. También hay cambios en el calendario de la Fórmula 1, confirmándose la cancelación del Gran Premio de China de 2023.
La Fórmula E 2023 arrancará en México
El calendario arrancará el 14 de enero en México, repitiendo en el Circuito Hermanos Rodríguez. En este trazado – utilizando diferentes configuraciones que la Fórmula 1 – se han vivido algunas de las carreras más espectaculares de los casi diez años de historia de la Fórmula E. Dos semanas más tarde se trasladarán hasta Diriyah, la segunda ciudad más importante de Arabia Saudí, para celebrar la primera carrera doble del año. Una de las novedades es la inclusión de India en el calendario (de donde procede Mahindra, uno de los fabricantes participantes) con un circuito en Hyderabad.
Las siguientes pruebas son las de Ciudad del Cabo en Sudáfrica y Sao Paulo en Brasil, antes de llegar a territorio europeo con los e-Prix de Berlín en abril y el de Mónaco a principios de mayo. Berlín, un clásico donde se ha competido en muchas ocasiones (en el antiguo aeropuerto Berlin Tempelhof en concreto), también tendrá carrera doble.
El e-Prix de Mónaco se organiza unas semanas antes que el Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1, manteniendo los guardarraíles instalados – lo que por otro lado limita el movimiento en buena parte del pequeño principado. El siguiente evento previsto es el e-Prix de Indonesia en Yakarta antes de llegar hasta Portland. Es el cuarto emplazamiento de la Fórmula E en Estados Unidos tras ubicarse en Miami, Long Beach y Nueva York (en concreto, en Brooklyn) en años anteriores. Yakarta será una carrera doble, al contrario que la cita en suelo norteamericano.
Las dos últimas citas del año serán con carreras dobles, disputándose dos de ellas en Roma entre los días 15-16 de julio y el final de temporada en Londres entre los días 29 y 30 de julio. Es decir, el calendario al completo de la Fórmula E 2023 está condensado en apenas seis meses y medio, mucho más compactado que la Fórmula 1, el Mundial de Rallyes u otros campeonatos mundiales regidos por la FIA.
De todos estos circuitos, los que debutan en el calendario son los de Hyderabad, Sao Paulo, Ciudad del Cabo y Portland. Estos cuatro circuitos todavía están pendientes de superar las comprobaciones técnicas y de seguridad de la FIA de manera que cumplan con los requisitos necesarios para albergar pruebas del Mundial de Fórmula E.
Entre los próximos días 13-16 de diciembre, los equipos de la Fórmula E realizarán sus test de pretemporada. Un año más será en territorio español, en concreto en el Circuito Ricardo Tormo en Cheste, Valencia. Los equipos pondrán a prueba los experimentos hechos con el software de los coches debutantes de tercera generación, realizando test y simulaciones de carrera un mes antes de empezar el año en México.
Interés de marcas
Un aspecto interesante de la Fórmula E es el hecho de que las marcas o equipos involucrados no desarrollan los coches, sino que se les da el ‘pack’ básico. Es decir, tanto el chasis, suspensiones, carrocería y demás como el motor eléctrico, la batería y el inversor. El conjunto, desarrollado por Spark Racing Technologies, cuesta entre 800.000 euros y un millón de euros por monoplaza – una fracción del precio de un Fórmula 1 actual. Lo que los ingenieros de cada equipo desarrollan y exprimen es el software para sacarle el máximo partido a los monoplazas, tanto en términos de potencia del sistema eléctrico como a la gestión de energía.
En la actualidad están en la parrilla marcas como DS (ligada a Techeetah en el pasado y a Penske en la actualidad), Porsche, Jaguar, Mahindra, NIO, Maserati (debutante para 2023, asociándose al equipo Venturi) y Nissan. Además, Andretti corre como equipo cliente de Porsche, McLaren debuta en la Fórmula E asociándose con Nissan, el equipo ABT (aliado con Cupra al igual que en la Extreme E), tras la marcha de Audi, contará con sistemas de Mahindra y Envision Racing será el equipo cliente de Jaguar. En el pasado estuvieron otras marcas como Renault, Audi o Mercedes, quienes ganaron el campeonato en las dos últimas temporadas.
E-Licencia en la Fórmula E
Al igual que los pilotos de Fórmula 1 requieren de una Superlicencia para poder competir en grandes premios, a los pilotos de Fórmula E se les exige una E-Licencia. El Consejo Mundial del Motor aprobó la introducción de una E-Licencia para entrenamientos libres en esta reunión en Bolonia. Esto les permite poder rodar en los Libres 1 de los e-Prix sin tener una E-Licencia, pudiendo darles a todos los equipos kilómetros de aprendizaje a pilotos nuevos. Es lo mismo que ocurre en Fórmula 1, donde existe una Superlicencia para entrenos libres.