El Gobierno francés prepara, dentro de sus medidas de ajuste presupuestario, la supresión de una serie de exenciones fiscales en la compra de viviendas y en dispositivos para equipamientos ecológicos como la instalación de paneles foto-voltaicos por un monto de cerca de 2.000 millones de euros. El diario económico galo Les Echos avanzó este viernes que el ministerio de Ecología ha preparado ya un paquete de exenciones «verdes» que desaparecerán en el presupuesto de 2011 que se presentará a la vuelta de las vacaciones de verano, que permitirá un ahorro de 1.000 millones de euros a las arcas públicas.
Eso afectará en particular a las desgravaciones por desarrollo sostenible, cuyo coste para el presupuesto del Estado fue el pasado año de 2.800 millones de euros, el doble de lo inicialmente previsto.
El ministerio justificó el recorte, en declaraciones a Les Echos porque «desde 2011 alcanzaremos el objetivo de desarrollo que nos habíamos asignado para 2020».
Uno de los principales cambios es la reducción a la mitad de la exención para los particulares que instalen en sus casas placas solares para producir electricidad, que además tienen garantizada la compra de la energía que generen a un precio de 580 euros por megavatio, frente a los 35-42 euros del megavatio producido por las centrales nucleares.
Otra es la disminución de las obras de eficiencia energética en las viviendas susceptibles de beneficiarse del actual crédito de impuesto.
Igualmente aparecen amenazadas, según el diario económico, las subvenciones a los bio-carburantes.
El diario también indicó que el departamento de Vivienda también va a eliminar dos de los cinco dispositivos fiscales de apoyo a la compra de vivienda, en particular el que permite desgravarse durante el primer año un 40% de los intereses del crédito hipotecario y un 20% los cuatro años siguientes.
Tanto esa medida, -que fue una de las promesas de campaña del presidente francés, Nicolas Sarkozy, materializada poco después de su llegada al Elíseo-, como el ‘Pass foncier‘ -ayuda para familias con pocos recursos para adquirir casas nuevas-, deben desaparecer desde el próximo 1 de enero, de acuerdo con la información periodística.
El Gobierno francés se ha fijado el objetivo de suprimir exenciones fiscales que le permitan ahorrar entre 8.500 y 10.000 millones de euros en los dos próximos años, dentro del esfuerzo de 40.000 millones de recorte del gasto público para reducir el déficit al 6% del Producto Interior Bruto (PIB) el año próximo y a un 3% del PIB como máximo en el horizonte de 2013.