El ministro de Economía británico, George Osborne, respaldó este lunes que se refuerce el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) para evitar que se repitan crisis de deuda como la de Grecia, pero avisó de que no aceptará que se apliquen sanciones financieras a Reino Unido por déficit excesivo porque su país no forma parte de la eurozona.
«Para que el PEC sea eficaz y creíble, la UE debe dejar claro que actuará contra los Estados miembros que no lo respeten», señaló Osborne en una carta dirigida al resto de ministros de Economía de la UE.
En su misiva, el ministro de Economía británico defiende «un mayor uso de las sanciones no financieras» contra los incumplidores.
En cuanto a las sanciones financieras, recuerda que ya existen en el Tratado para los países de la eurozona y defiende que en el futuro puedan aplicarse también a aquellos Estados miembros que quieran adherirse a la moneda única.
«No obstante, las sanciones no pueden aplicarse a Reino Unido», resalta Osborne.
Asimismo, acepta que la UE pueda revisar las cuentas públicas de los Estados miembros antes de su aprobación parlamentaria para detectar posibles desviaciones, pero deja claro que «el presupuesto británico se presentará en primer lugar al parlamento británico».
El ministro de Economía británico apuesta además por prestar más atención a la evolución de la deuda y a su estructura. «Los Estados miembros que tienen mucha deuda a corto plazo pueden ser más vulnerables a problemas de refinanciación cuando se deteriora el sentimiento del mercado que aquellos con deuda a largo plazo», apunta.