El principal indicador de la Bolsa española, el Ibex 35, perdía en los primeros compases de la sesión el 1,23% y ponía en peligro los 10.300 puntos, con los diferenciales de la deuda española y alemana disparados, y los bancos y pesos pesados del mercado como valores más castigados.
A las 09.10 horas el selectivo español perdía 128 puntos y se situaba en 10.300 unidades, con lo que el descenso acumulado desde enero alcanzaba el 13,72%. El resto de plazas europeas comenzaba la sesión con prudencia y sin tendencia clara, ya que París perdía el 0,28% y Milán, el 0,18%, en tanto que en Londres el FTSE avanzaba el 0,02%.
Esta semana los inversores estarán pendientes de la reunión del G-20, en la que la Unión Europea (UE) espera discutir con Estados Unidos sobre su reciente plan de estímulo monetario y sus posibles efectos en otras economías.
Además, se publican los datos de inflación en varios países europeos y los resultados empresariales de algunas cotizadas como Repsol y Telefónica, que hoy abona más de 3.000 millones de euros de dividendo.
En España, apenas media docena de cotizadas aguantaba en zona de ganancias, entre las que destacaba Gamesa (1,62%), BME (0,23%) y el Popular (0,37%). En el otro extremo de la tabla Sacyr lideraba los descensos del Ibex con un recorte del 1,86%.
En tanto que los pesos pesados del mercado y los bancos cotizados sufrían retrocesos del 1,34% para Iberdrola; del 1,23% para Banesto; del 0,75% para Repsol; del 0,75% para Inditex; del 0,73% para Bankinter; del 0,66% para BBVA; del 0,37% para Sabadell; del 0,26% para Santander; del 0,22% para Telefónica, y del 0,03% para Endesa.
Dentro del mercado continuo destacaba el fuerte descenso de Quabit, antes Afirma, del 5,97%. El euro abrió hoy a la baja en el mercado de divisas de Fráncfort y se cambiaba a 1,3938 dólares, frente a los 1,4045 dólares de la jornada anterior.