El presidente de la República, Giorgio Napolitano, ha designado este miércoles senador vitalicio al excomisario europeo Mario Monti, al que en los últimos días se ha mencionado como posible sucesor del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, si finalmente se formara un gobierno de tecnócratas para dirigir Italia.
Según ha informado la Presidencia de la República en un comunicado, la designación de Monti, profesor de economía política, presidente de la Universidad Bocconi de Milán y comisario europeo entre 1994 y 2004, busca reconocer los «altísimos méritos en el campo científico y social» de éste.
El nombramiento de Monti como senador vitalicio ha sido ratificado también por el propio Berlusconi, precisa el comunicado. Napolitano ha sido el encargado de informar al interesado de su nuevo cargo, al igual que ha informado de ello al presidente del Senado, Renato Schifani.
Reformas anticrisis
El presidente de la República también ha asegurado que «no hay ninguna incertidumbre» de que el primer ministro, Silvio Berlusconi, dimitirá después de aprobar las reformas económicas exigidas por la UE y ha precisado que «en breve» se formará un nuevo Gobierno que pueda tomar «decisiones adicionales» o «se disolverá el Parlamento» para convocar elecciones generales «lo antes posible».
Según ha explicado en un comunicado, las opciones serán «o un nuevo gobierno en poco tiempo o la disolución de las Cámaras» para comenzar «enseguida» una campaña electoral. Por otra parte, Napolitano ha precisado que los temores acerca de que pueda proclamarse en Italia «un prolongado periodo de inactividad gubernamental o parlamentaria» son «infundados» ya que «es posible aprobar en cualquier momento decretos de urgencia».
Ante la situación «alarmante» que han sufrido este miércoles los mercados, que han dejado a Italia al borde del rescate, Napolitano ha precisado que la ley de estabilidad, que contiene las medidas aprobadas por Bruselas, tendrá que aprobarse en el Parlamento «en los próximos días», como ya han exigido los presidentes de las Cámaras, Renato Schifani y Gianfranco Fini, así como la oposición.
Precisamente, Fini y Schifani han insistido en que las reformas tendrán que ser aprobadas esta semana «o como máximo la próxima», mientras la oposición ha exigido que las reformas sean ratificadas en el Parlamento antes del domingo. Napolitano ha recordado que después de la aprobación de las reformas iniciará el periodo de consulta con todos los jefes de partido para tomar una decisión acerca del futuro político italiano.