La agencia de calificación crediticia Moody’s ha advertido este lunes de que el deterioro de los parámetros de deuda y el riesgo de que aparezcan nuevas obligaciones financieras «están ejerciendo presión» sobre la perspectiva ‘estable’ que hasta ahora mantiene la nota de solvencia ‘AAA’ otorgada a Francia por la calificadora de riesgos.
En este sentido, Moody’s advierte de que el Gobierno galo cuenta ahora con «menos margen de maniobra» para sanear sus cuentas públicas del que tenía en 2008, ya que la obligación de consolidar los presupuestos tras las medidas de estímulo adoptadas llega en un momento crítico para el crecimiento.
«Unos relativamente altos niveles de deuda, el elevado gasto público en relación con el PIB y el importante déficit estructural y fiscal restrigen la capacidad del Gobierno para responder ante futuros ‘shocks’ y lastra la fortaleza financiera del Ejecutivo», expone la agencia.
De este modo, la calificadora de riesgos recuerda que, tal como anunció el pasado mes de octubre, «Moody’s está valorando la perspectiva estable de Francia» y afirmó que espera actualizar su análisis en el primer trimestre de 2012.
En este sentido, la agencia apunta que la posibilidad de mantener la perspectiva ‘estable’ de la nota francesa depende del compromiso del Gobierno galo con la aplicación de las necesarias reformas económicas y fiscales, así como de los progresos alcanzados en la mejora de la sostenibilidad.
No obstante, Moody’s advierte de que la ‘triple A’ de Francia puede verse presionada si no se observan signos de estabilización de los parámetros de deuda respecto al PIB en niveles accesibles.
Asimismo, la agencia apunta que un escenario económico o financiero adverso, incluyendo un mayor deterioro de la crisis de la deuda soberana, ya sea por su impacto directo en las cuentas francesas o por la necesidad de mayores apoyos a otros miembros de la eurozona, también podría ejercer presión sobre el ‘rating’ de Francia, así como sucedería en el caso de ser fueran necesarias más ayudas a la banca francesa.