La secretaria de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, ha asegurado que la reforma laboral no tocará las prestaciones por desempleo pese a las necesidades de reducción del gasto, y ha asegurado que «la única medida» que adoptará en ese sentido será «la lucha contra el fraude» entre aquellas personas que las cobran de manera «injusta».
En rueda prensa para valorar los datos del paro de enero, Hidalgo ha añadido que, por tanto, las partidas destinadas en los Presupuestos a la cobertura del desempleo «son intocables» y que incluso «se incrementarán si hay que hacerlo». Preguntada por si se llegará a los seis millones de parados, no ha querido hacer predicciones y ha dicho que no tiene «una bola de cristal», pero ha mostrado su «deseo» de que no se alcance esa cifra.
Por otro lado, ha señalado que la reforma laboral que prepara el Gobierno está «más justificada» que nunca, a lo que ha añadido que el Ejecutivo «valora muchísimo» el acuerdo alcanzado por los agentes sociales sobre negociación colectiva, pero que «el mismo respeto o más merecen» los 5,3 millones de parados «a los que va dirigida la reforma». «Haremos lo que tengamos que hacer», ha sentenciado.
Por otro lado, la secretaria de Estado de Empleo sostiene que la reforma laboral tendrá como principal objetivo que el despido sea el último recurso para las empresas con dificultades y que, como el resto, no permitirá generar empleo de forma inmediata. Si bien, ha dicho que, en combinación con el resto de las reformas previstas, aportará mas confianza y contribuirá a marcar la senda del crecimiento económico.
Asimismo, ha añadido que otros de los objetivos de los próximos cambios en el mercado de trabajo serán que la formación se constituya como un derecho individual de los trabajadores y la lucha contra el absentismo laboral.