El copago farmacéutico para los pensionistas sigue siendo caballo de batalla para Tomás Gómez y los suyos. En la sede de Callao no están dispuestos a dejar que los mayores paguen por sus medicinas. Lo consideran un «impuesto a los enfermos», denunciaba Enrique Cascallana, secretario de comunicación del PSM.
Así que han decidido comenzar una campaña para recoger 50.000 firmas y presentar una iniciativa legislativa popular que haga que el Gobierno de Esperanza Aguirre garantice la financiación al 100% de las prestaciones farmacéuticas y sanitarias en la comunidad de Madrid. Según los datos facilitados por Cascallana, a fecha del 1 de abril de 2012, 1.005.916 personas perciben una pensión contributiva en la región; hay un millón y medio de pacientes con enfermedades crónicas y 531.000 parados que, cuando entre en vigor el Real Decreto 16/2012 de 20 de abril, tendrán que pagar parte de sus medicamentos si perciben alguna prestación económica.
«Necesitamos frenar estas medidas», señala Cascallana, por eso impulsan esta iniciativa.
«Hablar de impuestos»
El PSM interpreta el anuncio de la modificación de los Presupuestos de la Comunidad para 2012 realizado por Esperanza Aguirre en el pleno de este jueves como la historia de un «nuevo recorte». Y los socialistas no están dispuestos. «Queremos hablar de impuestos, no de recortes», afirma Cascallan porque la región es «la campeona de los recortes». No obstante, el PSM «no espera» que el Gobierno les llame para dialogar.
La oposición considera que el problema de Madrid no es de recortes, sino de ingresos. De ahí que propongan medidas como la recuperación del Impuesto de Sucesion, con el que calculan que se recaudarían 2.000 millones, acabar con los «regalos fiscales» a la enseñanza «de élite» y acabar con la existencia de privilegios fiscales haciendo que la Iglesia pague el IBI de sus edficios. En definitiva, hacer una fiscalidad «más justa».
La «guerra» por Bankia
Enlanzando con los impuestos, Cascallana aprovechaba para denunciar que la situación por la que atraviesa Bankia, la antigua Caja Madrid, es responsabilida «no sólo» de Miguel Blesa y Rodrigo Rato, sino también de la «guerra permanente» entre Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón por hacerse con el poder de la entidad.
Los socialistas de Madrid son contrarios a la nacionalización de Bankia para después «malvenderla» a la banca privada, que es lo que dice el PSM que hará el Gobierno cuando se quede con BFA, la filial del banco. Lo que defienden desde Callao es que se nacionalice parte de la banca para que el crédito pueda llegar más fácilmente a las pymes y las familias.
Cristina Rodríguez